La Armada de Ecuador esta lista para proteger los mares alrededor de Galápagos de la pesca ilegal por parte de barcos extranjeros, cuyas visitas amenazan anualmente la flora y fauna del archipiélago. En 2018 comenzaron operaciones de entrenamiento en Galápagos, después de que las autoridades capturaran un barco en el área protegida el año anterior. El barco enarbolaba una bandera china y transportaba 300 toneladas de pescado cuando fue capturado. El problema es que el número de barcos pesqueros extranjeros llega a un punto en el que empiezan a saquear los ecosistemas”, dijo el capitán de fragata Guillermo Miranda, comandante del barco capturado, que pasó a llamarse Hualcopo después de que, gracias a las ganancias legales, fuera entregado permanentemente a Ecuador en 2020. “Cuando pescan afectan a especies realmente migratorias, que en muchos casos forman parte del ecosistema marino de Galápagos”, afirmó Miranda. “Es un problema bastante serio, no sólo para Ecuador.” Seis buques ecuatorianos participaron en ejercicios de entrenamiento del 23 de junio al 9 de julio, junto a embarcaciones de las armadas de Estados Unidos, Perú y Colombia, donde simularon operaciones para interceptar y abordar embarcaciones pesqueras. Cada año, una gran flota pesquera, en su mayoría con bandera china, navega cerca de las Galápagos. El gobierno de Ecuador dice que los barcos apagan sus radares para evitar que sus actividades pesqueras sean monitoreadas. China dice que sus barcos pesqueros cumplen con las normas para aguas internacionales, añadiendo que las características operativas de los barcos pesqueros de calamar no permiten la captura incidental de tiburones u otras especies marinas protegidas. En un comunicado oficial, la Armada ecuatoriana recordó que la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (CONVEMAR), que Ecuador firmó en 2012, regula las actividades marítimas y establece los derechos y deberes de los países costeros. Esta convención fomenta la cooperación internacional, la protección de los océanos y el desarrollo marítimo de las naciones, además de definir los límites de las zonas marítimas. Dentro de este marco, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura considera la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (INDNR) como una grave amenaza para la estabilidad de los recursos pesqueros globales, estimando que esta actividad ilícita produce entre 15.5 y 36.4 mil millones de dólares al año, lo que equivale al 14% o 33% de la pesca mundial.