El Gobierno de Reino Unido ha implementado una campaña a lo largo de la región para recaudar fondos dirigidos a mejorar la calidad del aire.
En medio de la preocupación por la ola de calor que azotó gran parte de Europa y principalmente a Reino Unido, el gobierno reconoció otro problema medioambiental que está afectando a los ciudadanos. Se trata de la contaminación del aire, compuesto por partículas de la emisión del gas de los carros y combustibles fósiles, que un estudio ha demostrado su efecto nocivo en la salud al causar demencia.
La Agencia de Seguridad de Salud del Reino Unido confirmó la posibilidad de que “la polución del aire contribuye a una disminución en la habilidad mental y demencia en las personas mayores”. El estudio, según Daily Mail UK, explica que las partículas tóxicas invaden los vasos sanguíneos al ser inhaladas, e interrumpen la circulación sanguínea al cerebro.
Es posible incluso que estas partículas ataquen directamente a ciertas neuronas, causando un daño más profundo y permanente.
Aunque se ha reconocido como un problema, aún no hay una cifra oficial de personas que sufran demencia como consecuencia de la polución. Aún así, se estima que 1 de cada 5 pacientes con esta condición son víctimas de las partículas tóxicas en el aire.
La polución del aire no solo ha sido vinculada a enfermedades neurológicas, ya se ha demostrado que influye en enfermedades cardiovasculares y puede causar infartos.
“Creemos que hay un caso sólido para que los efectos de los contaminantes del aire en el sistema cardiovascular tengan un efecto secundario en el cerebro. Pensamos que es probable que tales efectos tengan un efecto sobre el suministro de sangre al cerebro”, explican los investigadores.
“Por lo tanto, consideramos que la asociación entre la exposición a los contaminantes del aire y los efectos sobre el deterioro cognitivo y la demencia probablemente sea causal con respecto a este mecanismo”, añaden.