Guata cervecera, cola en funda, cintura de gallina, barrigón, panzoncito, gordito. Las formas de llamar, con cariño o en forma despectiva, a quienes tienen la barriga grande son diversas y llenas de imaginario popular.
En algunos casos, estas personas son vistas como símbolo de buena vida, de buena comida. Sin embargo, según el cardiólogo Roberto Lecaro y otros profesionales, esta característica es más bien símbolo de alarma.
Lecaro dice que es la enfermedad de la barriga grande. “Es sinónimo de daño. Significa que hay más grasa en la sangre, más diabetes, más hipertensión, más ataques cardiacos, más derrames cerebrales y más muertes”, refiere.
Y la barriga grande es la característica principal de un gran porcentaje de guayaquileños. Lecaro explica: “Mientras más grande es el abdomen, más grasa dañina tiene esa persona y más riesgo tiene de contraer enfermedades cardiovasculares como hipertensión, obesidad y diabetes. Mientras más crece la grasa en el abdomen se va regando al hígado y páncreas. Es una grasa dañina que crea sustancias inflamatorias, que inflaman los huesos, los músculos, aumenta la presión, la frecuencia cardiaca, la insulina en la sangre…”
Lecaro da cifras concluyentes. En el mundo mueren 18 millones de personas al año por enfermedades cardiovasculares. La Organización Mundial de la Salud cita, en cambio, que la hipertensión arterial afecta a más de uno de cada tres adultos de 25 años en el mundo.
En el Ecuador, según el Estudio de Prevalencia de Hipertensión Arterial del 2012, tres de cada diez personas son hipertensas. Lecaro indica que una persona muere en el país cada 30 minutos por males cardiovasculares.
En Guayaquil, este Diario recopiló informes de cinco áreas de salud del centro, sur, suroeste y norte, además de Samborondón. Estos señalan que los males cardiovasculares prevalecen. Afectan por igual a los habitantes de zonas de mayor comodidad económica, como aquellas de sectores pobres.
Es más, la obesidad como enfermedad sobresale en el centro, norte y Samborondón, no así en el sur y suroeste.
En el área de Salud 8, ubicada en la ciudadela Sauces 3 y que comprende a una población de 199.885 habitantes de Sauces, Alborada, Vergeles y Las Orquídeas, en el 2013 (enero a mayo) hubo 219 casos de obesidad. En el 2012, 553.
En el centro, área de Salud 7 de Cuenca y Noguchi, que agrupa a 14 centros de salud con una población de 190.443 habitantes, se trataron 21 casos de obesidad; en el 2012 hubo 115.
En tanto que en el área de Samborondón, que cubre una población de 70.000 habitantes, se registran 304 casos de obesidad entre enero y marzo del 2013. En el 2012 no consta entre los primeros diez males.
Con porcentajes que fluctúan, la hipertensión y diabetes prevalecen en las cinco áreas de Salud consultadas. La más alta cifra está en el Área 1, ubicada en la maternidad Matilde Hidalgo de Prócel del Guasmo sur, que agrupa a 14 unidades con una población de 292.969 habitantes. Allí no hay obesidad, pero la hipertensión registra 3.759 casos entre enero y abril del 2013. En el 2012 hubo 12.142.
María del Carmen, de 45 años, una de las pacientes del Guasmo sur, cooperativa Unión de Bananeros, padece de hipertensión desde hace tres años.
“Sé que tengo como 60 libras de más, pero no sé cómo bajarlas. Trato de hacer dieta, pero como en mi casa comen de todo, a mí me dan ganas y caigo en la tentación”, dice.