El Cuerpo de Bomberos de Guayaquil realiza intensos preparativos, para enfrentar los estragos que genere el fenómeno de El Niño.
Consultado por “Punto de Orden”, el primer jefe de la institución, Martín Cucalón, informó que mantienen permanentes reuniones con personal de la Secretaría de Gestión de Riesgos, para capacitar a los elementos en materia de prevención y rescate.
Adicionalmente, dijo, la Prefectura del Guayas les brinda todo su apoyo, incluyendo la eventual compra de los equipos que sean necesarios.
El coronel Cucalón explicó que el Cuerpo de Bomberos de Guayaquil, cuenta actualmente con 600 personas contratadas, y 2.400 voluntarias. Esta forma de colaborar, de forma gratuita, permite ahorrar muchos recursos en salarios.
Inseguridad les afecta
Al evaluar su gestión, el comandante bomberil reconoció que los altos niveles de inseguridad afectan el trabajo diario, especialmente en las zonas consideradas de mayor peligro de la ciudad.
De ahí que en todas las emergencias, los bomberos acuden con cascos y chalecos antibalas. Incluso se analiza la forma de “blindar” las ambulancias, ya que varias ocasiones han sido agredidos y tiroteados, a la hora de recoger heridos por accidentes o enfrentamientos armados.
En algunos casos, agregó Cucalón, han tenido que esperar la llegada de la Policía para atender a las víctimas, debido al nivel de peligrosidad que existe en ciertos sectores de la urbe. Sin mencionar que ciertos habitantes obstaculizan su trabajo.
Asimismo, en los hospitales se está implementando un protocolo de seguridad, para evitar que delincuentes entren a cometer asesinatos, como ya ha ocurrido.
Otro aspecto en el cual trabajan, es en el permanente mejoramiento de la brigada forestal, la más grande del país, con 11 años de permanente capacitación y entrenamiento.
El coronel Cucalón recordó que el Cuerpo de Bomberos de Guayaquil, atiende por año alrededor de 40.000 emergencias.
