La canción que tiene 22,174,421 de visualizaciones en YouTube ha generado un debate debido a su letra, en la que relata sobre una adolescente que no tiene control, enfatizando la vida sexual de la menor.
«Es serio ya que afirman que es una joven de 14 años; y, a pesar de que el sexo durante la adolescencia es común, debido a la etapa hormonal, una cosa es que adolescentes tengan relaciones sexuales y otra es que un grupo de adultos aplauda que una chica de 14 años se introduzca a la droga y a tener relaciones sexuales con adultos», señala José Luis Freire, músico y psicólogo en el campo.
El experto Freire indica que la canción fue creada con fines comerciales tratando de sonar bien para las nuevas generaciones, «porque los interpretes ya tienen 30 años; entonces, su afán de hacer una canción que genere likes es una generación perdida en drogas». «Y cruzan todas las barreras morales que más pudieron», expresa Freire.
Esta actuación también molestó al cantante y compositor ecuatoriano Fausto Miño. Sostiene que es un exceso, y lo más serio es que se considere a la mujer como una «mascota sexual».
«Es una magnificación de lo que hacen años artistas que ya están desconcertados con su misión y con la sociedad». Un artista tiene la capacidad de elevar a la sociedad de manera sencilla; considero que esto es inevitable para un artista. Uno desea brindar a la sociedad elementos positivos, alegrías, recuerdos y estar a su lado en todo lo positivo. Actualmente, el asunto más serio es la justificación de la mujer como si fuera una mascota sexual, no tanto una compañera como una mascota sexual. Eso resulta doloroso para la humanidad y para los seres humanos.
Conductas peligrosas
- Exaltación de la libertad personal
- Normalizar el consumo de drogas
- Presión estética en el aspecto físico la mujer
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