BBC .- Al menos 36 personas murieron y decenas resultaron heridas por la colisión de dos trenes en el norte de Grecia en la noche de este martes.
Los servicios de rescate acudieron al lugar del accidente, cerca de la ciudad de Larisa, para asistir a las víctimas y extinguir el incendio causado.
En conferencia de prensa, el portavoz de los bomberos, Vassilis Vathrakogiannis, informó sobre 26 muertos, pero la cifra subió posteriormente.
Se indicó que 66 resultaron heridas y fueron trasladadas a hospitales cercanos. Seis de ellas están en cuidados intensivos.
Los servicios de rescate siguen buscando a personas que pudieran estar atrapadas entre los restos de los trenes, en especial en los tres primeros vagones del vehículo de pasajeros.
Desde el lugar se informó que muchos de los viajeros eran jóvenes.
Unos 150 bomberos y 40 ambulancias, así como varias grúas y personal, se movilizaron para dar respuesta al incidente, informaron los servicios de emergencia griegos.
El gobernador de la región de Tesalia, Konstantinos Agorastos, dijo a medios locales que los trenes chocaron en la misma vía, según replicó la agencia Reuters.
En declaraciones a la cadena Skai TV, Agorastos dijo que el choque se produjo a alta velocidad entre un tren de carga y uno de pasajeros.
Según los primeros informes, el tren de pasajeros viajaba desde Atenas hasta Tesalónica y transportaba a unas 350 personas.
El gobernador regional explicó que los primeros cuatro vagones del tren de pasajeros descarrilaron en el accidente y añadió que los primeros dos quedaron “casi completamente destruidos” tras incendiarse.
Las imágenes divulgadas por los medios locales muestran cómo enormes llamas y gruesas columnas de humo se elevan desde los vagones descarrilados.
El gobierno griego declaró tres días de duelo por la tragedia.
“10 segundos de pesadilla”
Algunos de los pasajeros sobrevivientes describieron el momento del impacto y cómo escaparon del tren.
“Escuchamos un estruendo fuerte”, dijo Stergios Minenis a Reuters.
“Fueron 10 segundos de pesadilla. Dimos vueltas en el vagón hasta que caímos de lado y cesó la conmoción. Entonces había pánico. El fuego empezó de inmediato. Mientras nos girábamos nos quemábamos. El fuego estaba a la izquierda y derecha. Fue un caos durante 10, 15 segundos”.
Minenis cuenta cómo escapó entre incendios, cables colgando, ventanas destrozadas y personas atrapadas y gritando.
“Había dos metros de altura desde donde saltamos para salir y debajo había escombros de hierro, pero, ¿qué podíamos hacer?”, añadió.
“Fue como un terremoto”, explicó a los medios locales otro pasajero llamado Angelos Tsiamouras.
Una periodista griega que se encuentra en el lugar que “no quedaba nada” de los dos primeros vagones del tren de pasajeros .
“La colisión fue tan severa que los dos primeros vagones desaparecieron“, indicó Marina Rigou.
Otro de los viajeros del tren, llamado Lazos, indicó al periódico Protothema que la experiencia había sido “muy impactante”.
“Yo no me hice daño, pero me manché con la sangre de otras personas que resultaron heridas cerca de mí”, dijo.
“Esta es una noche terrible. Es difícil describir la escena”, sentenció.