El ministro de Transporte, Roberto Luque, rechazó supuestas irregularidades en el alquiler y compra de energía eléctrica, que realizó el gobierno a raíz de la crisis de comienzos de año.
Luque, quien estuvo encargado entonces de la cartera de Energía, anunció que pedirá a la Contraloría que realice un examen especial, a fin de desvirtuar anomalías y presunto tráfico de influencias, como denunciaron ciertos sectores.
El funcionario defendió la contratación de una barcaza de generación eléctrica, y afirmó que no hay “ni contratos de emergencia, ni sobreprecios, ni corrupción, ni lleve”.
Luque recordó que el denunciante, Marlon Pasquel, está involucrado en la venta al Estado de mascarillas, esas sí con sobreprecio.
Asimismo, explicó que esta contratación fue necesaria para solucionar la grave crisis energética, que aumentó por la llegada del peor estiaje de las últimas décadas. El mismo dejó casi sin agua los embalses que alimentan a las centrales hidroeléctricas.
Luque afirmó que el alquiler de una barcaza turca, es la mejor opción que tenía el país. Su costo es de 115 millones de dólares. Se trata de una verdadera barcaza de generación, y no una “gabarras con cuatro generadores arriba”, como las contratadas el siglo pasado. “Sí, efectivamente, nos robaban la plata. Acá son barcos generadores”, señaló.
El ministro anotó que con esta contratación, se podrá suplir sustancialmente un eventual déficit de energía en los próximos estiajes.
