Los subsidios de los combustibles se han incrementado de manera importante, pero el punto a favor es que ha contenido la inflación.
El incremento del precio del crudo -que en 2022 ha llegado incluso a superar la barrera de los $ 120- podría generar unos $ 1.200 millones netos de ingresos extras al fisco, si es que ese aumento se mantiene todo el año. Así lo comenta el ministro de Economía y Finanzas, Simón Cueva, al dar detalles de cómo se traduce el alza del crudo, pero a la vez los efectos que tiene en la importación de derivados.
Cueva explica que el gasto en subsidios ha subido bastante, debido a que los precios tanto de las gasolinas eco y extra, así como del GLP y del diésel están congelados. Basta ver cómo ha crecido la brecha entre el precio de la súper y la extra para darse cuenta del crecimiento del subsidio. Efectivamente, en la actualidad las gasolinas extra y eco país tienen un precio de $ 2,55 por galón, mientras que la súper ahora está en un precio sugerido de $ 4,86: más de dos dólares de diferencia.
En Ecuador, los recursos petroleros se dedican a varios fines. Por ejemplo, conforme sube el precio se deben entregar más transferencias a gobiernos locales y otras entidades, hay un efecto neto de lo que se recibe y lo que se debe pagar. Explica que ese neto al momento está calculado en $ 48 millones por cada dólar adicional del precio del crudo. Es que el Gobierno calculó en la proforma presupuestaria un crudo de $ 59,2 por barril este año. Pero en lo que va del primer semestre el promedio ha estado entre $ 92 y $ 93 el barril de crudo ecuatoriano, detalla el secretario de Estado. De acuerdo con los datos del Banco Central, solo en marzo y abril se registraron precios del crudo ecuatoriano de $ 100,4 y $ 94,7 por barril, respectivamente.
Si se toma en cuenta que el precio del crudo proyectado fue de casi $ 60 y que ahora estaría en $ 93 de promedio en lo que va del año, la diferencia serían unos $ 33. Si esta diferencia se mantuviera durante todo el año, entonces se recibirían de manera neta, ya luego de todos los gastos, unos $ 48 millones por cada dólar extra, es decir, $ 1.584 millones. A esto se le debe restar unos $ 350 millones que no se recibieron en enero febrero y marzo, producto de la rotura del OCP en diciembre, y el ingreso extra sería de unos $ 1.200 millones, dice el ministro.
Esta mayor liquidez para el Estado sirve para cumplir otras obligaciones como inversión pública, pagar atrasos y necesitar menos financiamiento. “Así no vamos a necesitar ir a mercados internacionales este año”, explica. Estos ingresos también ayudan a que Ecuador esté “mejor parado financieramente” para lo que pueda venir en un contexto mundial complejo.
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En la otra cara de la moneda están los altos subsidios que se están pagando ahora por los combustibles congelados. El ministro explica que si bien hay un alto costo, ese sacrificio fiscal que hace el Estado ha servido para contener el efecto inflacionario en el país, pese a lo que está pasando a nivel mundial.
Efectivamente la inflación en Ecuador se ha incrementado, pero no a los niveles de las inflaciones de otros países. Cueva comenta que, por ejemplo, Chile, Perú, Colombia y México tienen inflaciones que están entre el 8 % y el 10 %, mientas que Ecuador está en 3,38 % (inflación anual a mayo del 2022). “Es la segunda inflación más baja del continente y una de las más bajas a nivel mundial”, asegura.
El tema de la inflación fue analizado también por Fernando Díaz, experto de Citi Research, centro de investigación que es parte de la multinacional de servicios financieros Citigroup. Díaz confirmó que la inflación en Ecuador es mucho más baja que la de otros países.
El fenómeno se da -dice- debido a que la ecuatoriana estaba cara en dólares y la manera orgánica como se abarata y gana competitividad, dicha economía en momentos complejos, es con una inflación más baja. Este comportamiento se ha visto en muchos países que tienen problemas de competitividad. Por ejemplo, durante la crisis financiera en Europa, había países que crecían bastante, y otros no. Dependiendo de la política monetaria, se veía que Alemania tenía una inflación normal y crecía, en cambio Grecia y España tenían deflación. La economía ecuatoriana ajusta sus precios de una manera más lenta y de esta manera gana competitividad, comenta.
Fuente: El Universo
