El juicio político contra el presidente Guillermo Lasso está “manoseado”, y carece de pruebas reales.
Así lo señaló el ex ministro de Gobierno, Francisco Jiménez, en diálogo con “Punto de Orden”.
Jiménez recordó que en cualquier proceso justo, se buscan verdades, se revisan pruebas y se analizan hechos, y solo entonces, si encajan en un delito, viene la acusación.
En cambio, lo que hace la oposición en la Asamblea es sacar conclusiones, y luego tratar de llenar los “huecos”, con la esperanza de que el resultado sea algo medianamente coherente.
Basta citar que los contratos de Flopec, y que generan la denuncia de supuesto peculado, fueron firmados en el año 2018, cuando Lasso no era presidente.
El ex ministro advirtió que cualquier proceso serio, necesariamente requiere ciertas condiciones. Pero en este caso, los proponentes de la interpelación no han observado ninguna de ellas.
Jiménez hizo notar que la figura de “peculado”, es la que más aterroriza a cualquier actor político, ya que es imprescriptible, y ha provocado en muchos casos que los acusados huyan del país. Pero en este caso, no existen elementos que permitan imputar al presidente de ese cargo.
Incluso, dijo, la oposición busca incluir otros temas, expresamente prohibidos por la Corte Constitucional, lo cual podría traer sanciones para los asambleístas responsables.
El ex ministro recordó que en junio del año pasado, durante los desmanes cometidos por indígenas y grupos sociales, en la Asamblea intentaron destituir a Lasso. Algo que demuestra el nivel que maneja la oposición.
Jiménez justificó una posible muerte cruzada, un tema que asusta a muchos legisladores, pues saben que difícilmente serán reelectos.
