Mientras el gobierno no enfrente los problemas económicos estructurales, como la situación del fondo de pensiones del IESS y los subsidios a los combustibles, no funcionará nada de lo que haga.
Así lo advirtió el ex vicepresidente de la República, Alberto Dahik, en diálogo con “Punto de Orden”.
Dahik reconoció que la situación financiera del país es crítica, con un hueco de 11.000 millones de dólares, entre déficit y asignaciones atrasadas, y una deuda externa que demandará pagos a corto plazo, por otros 14.000 millones.
A su criterio, es fundamental que el régimen tome de inmediato la decisión de focalizar los subsidios a los combustibles. Solo así se eliminaría un gasto de 10.000 millones por año, que en su gran mayoría solo beneficia a los contrabandistas.
En el caso de la deuda externa, lamentó que exista un desconocimiento de la realidad. Los llamados “bonos de la deuda” ya están renegociados, y los montos con organismos internacionales también. Es decir, por ahora no hay forma de eludir los pagos.
IESS en crisis
El análisis del ex vicepresidente se extendió al IESS, cuyo sistema de pensiones corre peligro.
Dahik reconoció como normal que la seguridad social invierta en papeles del Estado. Sin embargo, es válido cuando esos papeles se pueden vender y comprar en bolsa de valores, y no cuando son una carga para la institución.
El problema es mucho más grave, precisó. Por un lado, se pagan 14 mensualidades como jubilación, pero los afiliados solo retribuyen con 12 aportaciones. Además, se establece como pensión el promedio de los 5 mejores años, cuando debería contemplar todas las aportaciones. Un beneficio que ningún otro país lo tiene.
Audacia
Y en materia política, Dahik fustigó los permanentes intentos de ciertos sectores políticos, por conseguir la impunidad de sus líderes.
Como ejemplo citó las reformas penales que intentaron aprobar en la Asamblea Nacional, y que finalmente no tuvieron éxito, debido al escándalo que generaron en la opinión pública.
Particularmente citó la que pretendía levantar la reserva de las investigaciones fiscales, y que ahora, con el “Operativo Purga”, demostró cuál era su verdadero objetivo.
En su opinión, por elemental decencia los autores de esa reforma deberían renunciar a sus curules.
Entrevista completa:
