El marino había pedido licencia de dos años para poder contraer compromiso con una ecuatoriana.
Luis Toledo Cruces compartía en sus redes sociales fotos de sus viajes a distintos destinos. Como marinero y miembro del buque Esmeralda también había posteado algunos de esos desplazamientos.
Este chileno, oriundo de la zona de BíoBío, en el centro de ese país, estaba viviendo en Guayas tras contraer compromiso con una ecuatoriana. Vivía en una urbanización del sector de La Aurora, en la jurisdicción de Daule, cantón vecino a Guayaquil.
Él fue rescatado luego de permanecer varios días secuestrado. Su esposa dio la alerta la semana pasada cuando no lo halló en su casa. El rapto se conoció porque su familia del marino en Chile dio la alerta. Los secuestradores pedían 100.000 dólares por su liberación, pero luego habían reducido la cantidad.
Para presionar por el pago, los secuestradores habían enviado un video de Toledo Cruces con los ojos vendados. Con dos dedos cortados de la mano izquierda y con signos de tortura. Un secuestro que tiene características de las bandas mexicanas para amedrentar a las familias para que cancelen el rescate.
Medios chilenos indican que la familia había alcanzado a depositar 2.000 dólares a una cuenta.
El fin de semana, la Fiscalía ecuatoriana confirmó que había dos detenidos en este caso.
Aunque el caso está en investigación, se baraja la hipótesis de que la adquisición de la casa fue un motivo para que los secuestradores lo hayan escogido como víctima.
La Policía ecuatoriana presume que tuvo algún tipo de acercamiento con algún individuo que pensaba que tenía una situación económica elevada.
La familia del marino en Chile indicó que ellos no tenían una solvencia económica fuerte para cubrir el rescate de 100.000 dólares.
Para venir a Ecuador y unirse a su pareja, Toledo había pedido una licencia de dos años sin sueldo a la Armada de Chile, por ello, aún sigue siendo parte de sus filas. La entidad se involucró en este proceso y mostró su preocupación por lo sucedido al marino.
Tras el rescate, Toledo fue llevado a una casa de salud para una valoración por el daño ocasionado.
La Policía ecuatoriana ha reconocido que los captores actuaron con violencia al amputarle dos dedos.
Desde Chile, la madre de Toledo declaró a Meganoticias que su hijo está bien. “Gracias a Dios, mi hijo está bien, lo rescataron y solamente eso. Dar gracias a la Policía de Chile, a todos los que estuvieron involucrados, a ustedes, a nuestra familia, a todos”.
Por la seguridad de su hijo, la familia ha optado por no abonar más detalles del rescate y los capturados en este caso.
Fuente: El Universo
