Uno de los aciertos del gobierno de Guillermo Lasso, fue impulsar una campaña contra la desnutrición infantil. Iniciativa que mantuvo y aumentó el actual régimen de Daniel Noboa, y que ya empieza a dar resultados.
Erwin Ronquillo, exsecretario técnico del programa “Ecuador crece Sin Desnutrición Infantil”, destacó los avances logrados por la anterior administración, y replicados por la actual.
Ronquillo explicó que el programa arrancó en el 2021, con un presupuesto de 250 millones de dólares. Sus objetivos principales fueron mejorar la situación de los niños de hasta 2 años de edad, incluso desde su gestación.
En ese aspecto, aplaudió la gestión que se realiza al día de hoy, pues para el 2024 el presupuesto del plan aumentó a 390 millones de dólares.
La Desnutrición Crónica Infantil (DCI), es la condición que sufren muchos pequeños en sus primeros 1.000 días de vida. Es decir, desde que son concebidos y hasta que cumplen 2 años. Una etapa fundamental en su desarrollo, pues es entonces cuando se desarrollan entre el 80 y el 85% de sus conexiones neuronales definitivas.
Gracias al programa, Ecuador pasó de ser el segundo país de América Latina con mayor DCI, a ser el cuarto, con una reducción del 3,5% en los índices, equivalente a 20.000 pequeños.
Y es satisfactorio, apuntó Ronquillo, que la actual secretaria, María José Pinto, sea designada binomio del presidente Noboa, para las elecciones del 2025. Símbolo de que este trabajo se intensificará, y será parte permanente de la agenda del gobierno.
Si bien se han logrado algunos éxitos, el exfuncionario estimó que todavía falta hacer mucho más.
Uno de los temas que creó el entonces presidente Lasso, y que ratificó Noboa, es el llamado “Bono de los 1.000 días”. Una ayuda económica para mujeres con hijos menores de 2 años. El apoyo consiste en 50 dólares mensuales desde el momento mismo de la gestación; 90 dólares al nacer el infante; y dos aportes de 120 dólares, cuando el niño cumpla 1 y 2 años de edad.
La condición es que la mujer acuda puntualmente a todos los controles médicos, que son gratuitos, tanto de ella como el de sus hijos, incluyendo las vacunas.