Representantes del Banco Mundial anunciaron que habrá financiamiento por desembolsar sobre resultados verificables en reducción de desnutrición.
Formar el camino para que en el 2030 la desnutrición crónica infantil no supere el 10 % es uno de los objetivos del actual Gobierno.
Según el presidente Guillermo Lasso, formularon un plan para la prevención y reducción de la desnutrición con una inversión de $ 350 millones para cada año de su administración. Señaló que esperan reducir un 6 % la desnutrición crónica en menores de dos años hasta 2025, es decir, de 29 % al 23 %.
En Ecuador afecta a uno de cada tres niños menores de dos años.
Lo señaló en la inauguración del seminario internacional “Los desafíos de una buena gobernanza para reducir la desnutrición crónica infantil en Ecuador”, que se desarrolla en Quito, entre este martes y miércoles.
Agregó que por cada dólar que el Estado invierte en la primera infancia evitará gastar en el futuro $ 17, que son ahorros en costos de educación por años repetidos y deserción escolar por una menor capacidad de aprendizaje. También se evitarían gastos por enfermedades respiratorias, gástricas, diarreicas y, años después, diabetes e hipertensión.
Mencionó que, a través del programa Infancia con Futuro, brigadas universitarias recorren el país y han identificado 184.000 beneficiarios, de los cuales 144.000 son niños menores de dos años y 39.500 son embarazadas que ya reciben atención en salud.
Además se creó el Bono Infancia con Futuro, que beneficia a 28.400 infantes y madres lactantes.