Cuando parecía que la racha de victorias consecutivas de Emelec se cortaba, una breve batalla aérea, una acción que pasó como una ráfaga, le dio otro rumbo a la historia del partido jugado ayer en el estadio Siete de Octubre.
Con el tiempo que se extinguía, tras un tiro libre, se elevaron Héctor Carabalí, arquero del Deportivo Quevedo, y Gabriel Achilier, zaguero eléctrico. El portero calculó mal en su vuelo y el balón pasó de largo. El futbolista azul, en el aire, aprovechó el error y conectó un cabezazo que le dio a los guayaquileños su sexto triunfo seguido, la consolidación como puntero y superó el récord de juegos ganados en un arranque de torneo (respecto a los cinco de 1996).
El tanto llegó a los 90+1 minutos y desató un festejo eufórico de los millonarios.
El conjunto rojo trató de sorprender a los 30 segundos. Kevin Chérrez envió, desde el sector izquierdo, un centro para Miguel Segura y este, antes de entrar al área, sacó un tiro que pasó cerca del arco de Esteban Dreer.
Nuevamente la fortaleza ofensiva de los eléctricos se basó en las llegadas por las bandas gestadas por Fulton Francis, Fernando Giménez y Marcos Mondaini, que buscaron con insistencia a Marlon de Jesús.
A los 17m, Óscar Bagüí puso una pelota para Mondaini que cabeceó y el esférico se fue por encima del horizontal de la valla de Carabalí.
La opción más clara para Emelec se produjo a los 25m; Giménez, tras eludir a Carlos Castro, centró rasante para De Jesús, pero su remate golpeó el cuerpo de Carabalí.
Instantes después hubo una acción reclamada como penal por los azules. Pedro Quiñónez centró y el balón topó la mano de Carlos Castro, pero el juez Samuel Haro no decretó pena máxima.
En la segunda parte, el DT Gustavo Quinteros potenció su ataque con el ingreso de Marcos Caicedo, Pablo Zeballos y Vinicio Angulo.
Sin embargo, el Quevedo casi sorprende a los 60m. Armando Paredes puso una pelota en callejón que le quedó a Luis Carlos Espínola, quien sacó un potente tiro que pasó cerca del poste izquierdo.