Guayaquil tendrá un nuevo Malecón. Se llamará “3000”, y estará ubicado en el Parque Samanes.
Así lo informó el alcalde, Aquiles Álvarez, durante su enlace radial de este miércoles.
El personero explicó que en el parque, cuya propiedad fue transferida íntegramente al municipio durante el gobierno de Guillermo Lasso, hay una extensa área que da al río Daule. Parte de ella se aprovechará para construir un malecón de 3 kilómetros.
El objetivo es convertir a la zona en un atractivo turístico, dijo.
El futuro malecón incluirá oficinas municipales, para facilitar los trámites a quienes viven en el norte de la urbe, y de paso descentralizar la administración.
Habrá una oficina para Ventanilla Universal, oficinas para la Dirección de Deportes, Bienestar Animal, Dirección de la Mujer e Inclusión Social. Además, se crearán espacios para los bomberos y la empresa Segura EP.
Corredor comercial es un éxito
En otro ámbito, destacó el éxito del llamado “corredor comercial”, instaurado en la zona de la Bahía, y que operará todo el mes de diciembre.
Según Álvarez, esta iniciativa de “peatonalizar” una parte del centro de Guayaquil, para permitir el trabajo de 900 comerciantes, comenzó muy bien, con ventas diarias por 55.000 dólares.
Los controles son estrictos, y hasta ahora no se ha reportado ningún robo, anotó.
El alcalde reiteró que se prepara un corredor popular similar en el sur de Guayaquil, que sería como una Bahía paralela.
Problemas en asfalto
En cuanto a las obras en marcha, destacó como las principales la reparación de la red de tuberías de un largo tramo de la calle Noguchi, que posteriormente será reasfaltada de forma íntegra. El objetivo es que esté todo concluido en enero.
Los trabajos en la Noguchi representan una inversión de 9 millones de dólares, pues el cambio de tuberías y el asfalto abarca 2.200 metros cuadrados, como parte de los 84 kilómetros de calles que serán reparadas.
Álvarez reconoció que la obra se complica, debido a la mala calidad del asfalto que se fabrica en el país. Además, algunos contratistas no realizan la mezcla adecuada, y como resultado los bacheos duran muy poco.
El personero dejó en claro que estas anomalías son fiscalizadas rigurosamente, y que todo mal trabajo significará severas multas.
Aquiles Álvarez afirmó que, para el 2024, se mantendrá la tónica 85-15. Es decir, el 85% del presupuesto para obras públicas, y solo el 15% para gasto corriente.
Eso significa que el próximo año, están previstos al menos 206 millones de dólares en diversos proyectos, y 149 millones en obras sociales.
Entre las obras que se ejecutarán destaca la solución vial entre las avenidas Isidro Ayora y de las Américas, que tardará 16 meses; en la avenida Juan Tanca Marengo, que durará 4 meses; y en la 25 de Julio, que estuvo paralizada 2 años.
Además, se invertirá una fuerte cantidad en el llamado “quinto acueducto”, que proveerá de agua potable a los miles de habitantes de Monte Sinaí y Ciudad de Dios, dos de los barrios más pobres de Guayaquil.
Límite de velocidad es necesario
En cuanto a la controversia por la reducción del límite de velocidad de la Vía a la Costa, de 90 a 70 kilómetros por hora, recordó que es algo necesario, debido a la gran cantidad de ciudadelas situadas en la zona.
En su opinión, la medida es necesaria. Sin embargo, reconoce que debe ir de la mano de la “cultura” de respeto, y no solo por posibles multas, sino hacia la vida de peatones y otros conductores.
Álvarez reconoció estar preocupado por lo que pase en la citada vía, y más aún con el traslado de una conocida empresa de contenedores al Puerto de Posorja, lo cual recargará todavía más el tránsito.
El personero advirtió que de por sí la vía Perimetral ya está saturada, y por ello la necesidad del llamado “Quinto Puente”, que será impulsado por el gobierno.
