Además, fueron arrestados Reynaldo Avelar Contreras, gerente de la empresa Estadios Deportivos de El Salvador (EDESSA), encargada de la administración del Cuscatlán, y Samuel García Montano, encargado de las llaves del recinto deportivo.
Estas personas serán acusadas en los próximos días, según señaló el Ministerio Público, por los delitos homicidio culposo, lesiones culposas y estragos públicos.
Hasta esta hora se desconoce aún si el fiscal general, Rodolfo Delgado, u otra autoridad de la Fiscalía brindará una conferencia de prensa para dar más detalles sobre la investigación del hecho y sobre las capturas.
La Fiscalía tampoco avisó a la prensa sobre los procedimientos de allanamiento que se llevarían a cabo, dos de ellos en las instalaciones del Estadio Cuscatlán.
La noche del 21 de mayo, los clubes Alianza FC y FAS disputaban en el Cuscatlán el partido de vuelta de los cuartos de final del torneo Clausura. El juego fue suspendido luego de que se le informara al arbitro principal sobre una estampida humana en la zona sur general del estadio.
Las 12 personas fallecidas eran aficionadas del Alianza, representativo de la capital.
El torneo Clausura fue dado por terminado y algunos jugadores de la Liga de la Primera División han solicitado que se reconsidere la decisión, ya que, según han expresado, les afecta a ellos, a la afición y a pequeños comerciantes.