Sebastiana Barrez (izquierda) y Maibort Petit (derecha), periodistas venezolanas que ejercen fuera de su país.
La voz es casi unánime en casi todo el mundo: las elecciones del domingo pasado en Venezuela fueron fraudulentas.
En diálogo exclusivo con “Punto de Orden”, dos reconocidas periodistas venezolanas, Sebastiana Barrez y Maibort Petit, quienes viven y trabajan fuera de su país, confirmaron que el supuesto proceso democrático solo tuvo un objetivo: tratar de legitimar la gestión del presidente Nicolás Maduro.
Hordas armadas impiden reclamos populares
Barraez, comunicadora de los portales Infobae y Punto de Corte, denunció que desde hace muchos años existe un poder absoluto en Venezuela. Y gracias a ello, la oposición no ha tenido formas de demostrar con las actas que Edmundo González, el candidato opositor, fue el verdadero triunfador de los comicios.
Además, para impedir los reclamos, el gobierno chavista sacó a las calles hordas armadas, que atacaron, e incluso asesinaron, a manifestantes civiles.
Tampoco hay confianza en el fiscal de Venezuela, un chavista a quien calificó de “bufón”, y que se pasa denunciando supuestas conspiraciones criminales contra Maduro, a fin de tener argumentos para perseguir a periodistas y militares que se opongan al régimen.
Barraez afirmó que en su país no existe división de poderes. Todos los estamentos responden al gobierno de Nicolás Maduro. Hasta la cúpula de las Fuerzas Armadas lo respalda, pero las bases saben la verdad.
La periodista señaló que, si bien el reclamo está en las calles, también reina el temor de una represión sangrienta.
Régimen criminal
De su lado, Maibort Petit, investigadora y politóloga, advirtió que es muy difícil combatir a un régimen criminal como el de Nicolás Maduro, y más aún demostrar el fraude, ya que el país utiliza un sistema de voto electrónico que no se puede auditar.
Petit recordó que el problema viene de muy atrás, cuando el gobierno impuso condiciones para esta elección, empezando por los candidatos. Fue así que descalificó a la líder opositora, María Corina Machado, y eliminó del registro a millones de ciudadanos.
Según sus cálculos, de los casi 5 millones de venezolanos que viven fuera del país, muy pocos pudieron votar. Otros 2,2 millones de jóvenes, que sí están en Venezuela, corrieron la misma suerte.
Además, el chavismo impidió el ingreso de observadores internacionales que no sean afines a su política. Solo los pertenecientes a grupos socialistas pudieron llegar.
Pata Petit, esta “votación electrónica” no es democrática, pues impide cualquier investigación.
Cuando regímenes autoritarios y criminales llaman a elecciones, no lo hacen para entregar el poder, sino para tratar de legitimarse, porque les importa muy poco la comunidad internacional, acotó.
La comunicadora recordó que en las pasadas elecciones, en el 2018, ya vivieron algo similar. Y le apena que toda la esperanza de cambio y transición de millones de sus compatriotas, no sirva de nada.
Lamentablemente, apuntó, no hay ninguna instancia internacional donde se pueda exponer este fraude.
