Autoridades peruanas implementaron una contundente medida, para combatir el robo de teléfonos celulares.
A partir del lunes, los dispositivos sustraídos serán bloqueados de inmediato, y adicionalmente, serán decomisados los equipos reportados como robados, y que pretendan activar nuevamente.
Una medida que surge como muy necesaria en Perú, donde se reportan diariamente los robos de 4.000 celulares.
Adicionalmente, está en marcha una extensa campaña informativa, alertando a los usuarios que si compran un celular robado o de dudosa procedencia, el equipo será bloqueado y no podrá activarlo en ninguna empresa operadora.
El control estará a cargo del Organismo Supervisor de Inversión Privada en Telecomunicaciones (Osiptel).
Los importadores de equipos móviles deberán registrar sus aparatos, para que el Osiptel pueda verificar su validez.
De forma paralela, los usuarios deberán “matricular” sus teléfonos nuevamente, con el fin de detectar con rapidez cuáles son robados, y cuáles tienen alterados sus códigos IMEI.
Los celulares comprados en el extranjero podrán ser usados en Perú, tras registrado en la lista de equipos válidos, o “lista blanca”, a través de la empresa operadora autorizada.
Las leyes peruanas sancionan duramente los robos de celulares. En caso de perpetrarse con violencia, que generen la muerte o lesiones irreversibles a los propietarios, los ladrones recibirán hasta 30 años de cárcel.
