El tres veces campeón mundial Sebastian Vettel, de Red Bull, ganó ayer el Gran Premio de Baréin de Fórmula Uno, en el que superó fácilmente a Kimi Raikkonen y Romain Grosjean, los pilotos de Lotus, en una carrera que fue blanco de críticas de grupos de derechos humanos y manifestantes antigobierno en esta dividida nación.
Tras tomar la punta definitivamente en la 17ª vuelta, el alemán Vettel tuvo amenazas en el resto de la ruta. Raikkonen cerró la brecha en las últimas cinco vueltas, pero no le alcanzó el tiempo. El francés Grosjean rebasó a Paul di Resta, de Force India, para llegar tercero, en su mejor carrera en la F1.
Vettel retuvo la punta en la competencia de pilotos, luego de 4 de las 19 carreras, y su ventaja sobre Raikkonen es ya de 10 puntos.
Fue un día para el olvido para Ferrari, con Fernando Alonso y Felipe Massa, quienes sufrieron problemas al inicio de la competencia.
El español tuvo que irse a los boxes dos veces en las primeras vueltas por desperfectos con su alerón trasero móvil, mientras que el brasileño sufrió daños en una colisión con Adrian Sutil, de Force India. Alonso fue octavo y Massa en el lugar número 15.
Paul Di Resta se adueñó de la cuarta plaza, mientras que el inglés Lewis Hamilton (Mercedes) terminó quinto.
El mexicano Sergio Pérez (McLaren) logró un meritorio sexto puesto tras varias batallas con su compañero de equipo, el inglés Jenson Button, que quedó décimo.
Mientras, el australiano Mark Webber (Red Bull) finalizó séptimo y el alemán Nico Rosberg (Mercedes) fue noveno, pese a que partió en la primera posición.
