Ecuador se convirtió, sin quererlo, en parte de una extraña ecuación entre los gobiernos de Venezuela, Brasil, Argentina y Colombia. A cambio de permitir que salgan del país 6 importantes opositores, actualmente refugiados en la embajada de Argentina en Caracas, dictadura de Nicolás Maduro exige la liberación de Jorge Glas. LEER TAMBIÉN: Argentina confirma que Brasil protegerá su embajada en Venezuela LEER TAMBIÉN: Correa y Glas ya no son bienvenidos en Estados Unidos por sus actos de corrupción El exvicepresidente ecuatoriano está recluido en “La Roca”, de Guayaquil, la cárcel de máxima seguridad del país, desde abril pasado, en que la Policía irrumpió en la embajada mexicana y lo arrestó. Glas afronta 2 sentencias por actos de corrupción, y otro caso por peculado en la reconstrucción de Manabí. Glas por antichavistas Para permitir que los 6 antichavistas salgan de Caracas, Maduro reclama la liberación y salvoconducto para el exsegundo mandatario. Ecuador no se ha pronunciado al respecto. En esta negociación intervienen como mediadores Colombia, a través de su canciller Luis Gilberto Murillo, y Brasil, que custodia la embajada de Argentina, debido a la ruptura de las relaciones con el régimen venezolano. Además de la libertad de Glas, Venezuela exige la entrega de un miembro de su gobierno, detenido por ahora en suelo argentino. Cruce de acusaciones Los 6 antichavistas tienen asilo del gobierno de Javier Milei, pero no pueden abandonar la legación diplomática, por el riesgo de ser detenidos de inmediato. Milei califica a Nicolás Maduro de “dictador criminal”, y se niega a negociar directamente. De ahí la intervención de Brasil y Colombia. Ambos países, con gobernantes afines al chavismo, se niegan a reconocer el supuesto triunfo de la oposición en las elecciones presidenciales pasadas.