La jefa de prensa de la selección admite presiones para que Jenni Hermoso suscribiera que el beso de Rubiales fue consentido
El País .- La trabajadora de la federación Patricia Pérez ha declarado en la Audiencia Nacional, donde ha aportado el contenido de su teléfono móvil, lo mismo que el hermano de la futbolista. La jefa de prensa de la selección femenina de fútbol, Patricia Pérez, ha declarado este jueves en la Audiencia Nacional que recibió presiones por parte de responsables federativos en relación con las manifestaciones de la jugadora Jenni Hermoso tras el beso que el entonces presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, le dio después de la final del Mundial. Según su declaración, la presionaron para encaminar la versión ofrecida por Hermoso. Pérez prestó declaración como testigo ante el juez Francisco de Jorge, titular del Juzgado Central de Instrucción número 1, que investiga a Rubiales por agresión sexual y coacciones. Además, tanto Patricia Pérez, conocida como Poki, como el hermano de la futbolista, Rafael Hermoso, han aportado al juez la información y los datos contenidos en sus respectivos teléfonos móviles. Los dos testigos han realizado un volcado de sus dispositivos en sede judicial para que el juez pueda corroborar sus respectivas declaraciones. Rafael Hermoso declaró el lunes ante el juez instructor. Entonces, aseguró que el ahora exseleccionador Jorge Vilda presionó a su hermana tras el beso propinado por Rubiales. El magistrado también ha tomado declaración como testigo este jueves al exdirector de Integridad de la RFEF Miguel García Caba. Fuentes fiscales han explicado que el volcado de su teléfono no era necesario para la investigación de los hechos. García Caba defendió su actuación en relación con el informe interno que elaboró el departamento que encabezaba sobre lo sucedido en la final del Mundial, y que cerró sin ninguna consecuencia para el expresidente y sin escuchar el testimonio de Jenni Hermoso, según fuentes próximas al caso. El día 22 la RFEF, que está encabezada por una comisión gestora que preside Pedro Rocha, anunció que prescindía de los servicios de García Caba, que se incorporó al organismo cuando Luis Rubiales llegó a la presidencia en mayo de 2018. Las salidas de Caba y la de Andreu Camps como secretario general el día anterior se produjeron después de las reclamaciones hechas por las jugadoras de la selección para que la RFEF reestructurase las áreas de secretaría general e integridad, así como el organigrama de fútbol femenino, el gabinete de la presidencia y el área de comunicación y marketing. Putellas, Paredes y Misa declaran el día 2 El juez instructor tomará declaración el 2 de octubre como testigos a las jugadoras de la selección Alexia Putellas, Irene Paredes y Misa Rodríguez. Además, el 10 interrogará como investigados a Vilda y a los directores de la selección masculina, Albert Luque, y de Marketing de la RFEF, Rubén Rivera. La teniente fiscal de la Audiencia Nacional, Marta Durántez, preguntó a Rubiales por cinco personas durante el interrogatorio ante el juez celebrado en el marco de la causa que se sigue por supuestos delitos de coacciones y agresión sexual. Las fuentes consultadas explicaron entonces que el ministerio público trató de averiguar si esas cinco personas, entre las que se incluyen Vilda y los mencionados Luque y Rivera, habrían tratado de coaccionar a la jugadora tras el beso forzado. Tras el interrogatorio, el instructor acordó a instancias de la Fiscalía que Rubiales no pueda comunicarse con la jugadora durante la instrucción de la causa abierta, prohibiéndole además acercarse a ella a menos de 200 metros. Según fuentes fiscales, Rubiales negó ante el juez que se produjeran coacciones hacia la jugadora de la absoluta y su entorno, así como que hubiera falta de consentimiento en el beso en la boca que le propinó. El expresidente de la federación contestó a las preguntas de todas las partes durante los cerca de 45 minutos que duró su declaración como investigado. Fue el día 12 cuando el juez citó a Rubiales. En ese momento, el magistrado admitió la querella presentada por la Fiscalía por los delitos de agresión sexual y coacciones contra él por el beso en la boca. El magistrado acordó las primeras diligencias en este procedimiento, entre ellas recabar de RTVE el vídeo o vídeos que tengan en sus archivos que recojan desde todos los ángulos el momento en el que el querellado besa a la denunciante, así como los minutos inmediatamente anteriores y posteriores al hecho relativos a la celebración del triunfo de la selección de fútbol femenino. Además, requirió a EL PAÍS el vídeo de la celebración en el vestuario que tiene colgado en internet, y al diario As el de los momentos del beso y cualesquiera otros relacionados con los hechos. Por su parte, el instructor solicitó al diario La Vanguardia el vídeo de la celebración en el autobús de la selección española de fútbol femenino.