Uber lanzará taxis sin conductor en Londres en 2026: inicia la era del transporte autónomo en el Reino Unido
Uber se prepara para dar un giro histórico al transporte urbano en el Reino Unido. La reconocida plataforma de movilidad anunció que a partir de la primavera de 2026 comenzará a operar con vehículos autónomos en las calles de Londres, gracias a una alianza estratégica con la empresa británica de inteligencia artificial y conducción autónoma Wayve. Este ambicioso proyecto se pondrá en marcha tras la autorización oficial del gobierno laborista británico, que permitirá pruebas piloto comerciales de vehículos sin conductor en zonas específicas de Inglaterra. Durante esta fase inicial, los ciudadanos podrán solicitar taxis autónomos a través de la app de Uber, marcando así un hito en la experiencia de movilidad urbana. La colaboración combinará la red global de Uber con la tecnología de conducción autónoma impulsada por IA de Wayve, en lo que ambas compañías describen como “un paso clave hacia la implementación masiva de v ehículos sin conductor en Europa”. Un desafío tecnológico en una ciudad compleja Londres no es cualquier ciudad para probar esta tecnología. Según Uber y Wayve, la capital británica y otras urbes del Reino Unido presentan condiciones viales complejas, con diseños urbanos y normas de tránsito muy distintas a las de ciudades estadounidenses donde anteriormente se realizaron la mayoría de las pruebas de nivel 4 (L4) de autonomía. Este entorno, aseguran, representa una oportunidad invaluable para entrenar y adaptar los sistemas de conducción autónoma a una mayor diversidad de escenarios reales. Regulación, seguridad y visión a futuro El despliegue de los primeros taxis sin conductor se enmarca dentro de un plan regulatorio más amplio. El gobierno británico trabaja actualmente en la Ley de Vehículos Automatizados, que establecerá requisitos estrictos de seguridad y funcionamiento para estos vehículos, equiparables al desempeño de un conductor humano altamente capacitado. Se prevé que esta legislación entre en vigor en 2027, momento en el cual se autorizará la venta generalizada de autos autónomos. La ministra de Transporte, Heidi Alexander, enfatizó que los proyectos piloto estarán guiados por tres principios: innovación, normativa clara y seguridad vial. Además, subrayó que el objetivo principal de esta tecnología es reducir el error humano, responsable del 88 % de los accidentes de tráfico. Aunque el Reino Unido lleva una década probando tecnologías de conducción autónoma con empresas como Wayve y Oxa, esta será la primera vez que el público podrá utilizar estos servicios de forma comercial. Lo que se aprenda de esta experiencia en territorio británico podría influir directamente en el futuro de la movilidad autónoma en todo el mundo.