Tras más de una semana de incertidumbre, se realiza la limpieza interna de las prisiones que fueron tomadas por los reclusos, durante los primeros días del Estado de Excepción.
En el caso de la cárcel de Latacunga, camiones retiraron cerca de 30 toneladas de desperdicios, que se habían acumulado a consecuencia de los incidentes.
La mayor parte de la basura corresponde a restos comunes, y a rezagos de mesas, sillas, colchones y otros enseres, destruidos durante los motines.
Parecida situación se vivió en la cárcel de Ambato, que también fue tomada la semana pasada por los internos.
Tras la irrupción de los militares, la calma volvió a los centros de detención. Y uno de los primeros pasos fue sacar la basura, que estuvo una semana acumulada en patios y corredores.