Para el analista jurídico Hugo Espín, la decisión del presidente Daniel Noboa, de declarar un “conflicto armado interno”, fue un poco apresurada.
Espín reconoce que existe un estado de emergencia, producto de la violencia de las bandas criminales, pero el “conflicto armado interno” es el límite de lo que puede hacer un gobierno. Por tanto, debió darle un margen de tiempo al Estado de Excepción.
En ese aspecto, advirtió que todavía no se recupera el control de las prisiones, uno de los temas que supuestamente justificaba la medida.
A su criterio, para llegar a ese extremo era necesaria la presencia de bandas que controlen vías, o que provoquen caos entre la población civil, algo que, según dice, no dijo, no ha ocurrido.
Además, el jurista consideró que el decreto del presidente, provocará que los “objetivos militares” sean neutralizados, y no judicializados, como corresponde.
Policía debe ser reformada
Espín estimó que, una vez superada la emergencia, el gobierno debe emprender una reforma integral de la Policía Nacional. Es decir, cambiar de modelo y volverla más eficiente.
En su opinión, el concepto de “Policía Comunitaria” no funcionó. Por tanto, es hora de depurar y fortalecer a la institución, y no volverla exclusivamente reactiva.
También calificó de “impresentable” la fuga de Colón Pico, y más aún porque escapó de la cárcel de Riobamba, que es pequeña y supuestamente fácil de vigilar.
Es hora, apuntó el analista, de terminar con el caos que reina en las prisiones, donde ya han ocurrido 5 masacres que han dejado cientos de muertes.
