El Bloque de Seguridad, compuesto por la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas, realizó nuevos operativos de control en varias cárceles del país, donde decomisó cuantiosos artículos prohibidos.
En especial incautó armas, droga y teléfonos celulares.
Prácticamente esta es la tónica de los registros. Desde que las Fuerzas Armadas tomaron el control en las prisiones, el 8 de enero, solo en las cinco cárceles que hay en Guayaquil se han hallado 4.000 celulares, miles de armas y millones de municiones.
A fin de evitar el uso de celulares, las autoridades dejaron a muchas de las celdas sin energía eléctrica, con lo cual no podrían cargarlos. Pero los reclusos se las ingeniaron, e ingresaron un cargador solar portátil en uno de los nueve pabellones de la Penitenciaría, donde actualmente hay casi 7.000 internos. Entre la Penitenciaría, la Regional, la Cárcel de Mujeres, La Roca y el Centro de Detención Provisional, hay en total 12.500 personas privadas de libertad.
El registro incluyó pisos, paredes, techos, tuberías y baños, ya que los presos suelen ocultar ahí sus pertenencias.
Hace solo unos meses, en una de las caletas, tras una pared falsa de un baño, había 6 fusiles y 38.000 municiones.
Otras prisiones
Mientras tanto, en el Centro de Privación de Libertad de Los Ríos, un operativo similar dejó como saldo el decomiso de 7 teléfonos celulares, 1 kilo de cocaína, marihuana y un cuchillo.
Y en el Centro de Privación de Libertad de Imbabura, una requisa realizada por elementos militares permitió incautar 10 teléfonos, 9 pipas de droga, 80 dosis de alcaloides y 3 cuchillos, entre otros artículos prohibidos.
