El juicio político contra el presidente Guillermo Lasso, se puso “cuesta arriba” para los asambleístas acusadores.
Así lo señaló el periodista y analista Martín Pallares, en diálogo con “Punto de Orden”.
Pallares hizo notar que el dictamen de la Corte Constitucional, que limitó la interpelación a solo el presunto peculado en la empresa pública Flopec, incomoda a los responsables de la interpelación, ya que se trata de un tema enredado y en el cual carecen de pruebas.
Es evidente, anotó, que los opositores no estaban preparados para esa única causal, que les impide tratar de “lucirse” ante el país.
Pallares advirtió que algunos acusadores, en su afán de ganar réditos políticos, quieren meter otros temas en el juicio, como las presuntas irregularidades en la venta de bonos de deuda externa. Pero al hacerlo violan el dictamen de la Corte Constitucional, algo que podría acarrearles severas sanciones.
Además, quieren que solo se toquen determinados periodos, pues al escarbar más allá, se encontrarán irregularidades que el correísmo no quiere mostrar. Por ejemplo, los contratos entre Petroecuador y Petrochina, que tanto perjudicaron a nuestro país.
En su opinión, es posible que existan los votos suficientes para censurar y destituir al presidente, pero desde a costa de comprometer la legitimidad del juicio.
En este marco, consideró que el gobierno cometió errores de estrategia, a la hora de armar la defensa de Lasso.
La más importante: confiarse en que la Corte Constitucional no admitiría la interpelación, y no mencionar en las audiencias los evidentes errores y las mentiras presentadas por los acusadores.
Basta ver, dijo, que la Corte argumentó que en el informe de la Contraloría sobre los contratos de Flopec, se detectaron responsabilidades penales, cuando una simple lectura revela que eso es falso.
