El Universo .– Los intrépidos ladrones quisieron asaltar en el parque zoológico Bubalcó, situado en la localidad de Martín Guerrico, provincia argentina de Río Negro
Como muy bien dateados –informados- actuaron los intrépidos ladrones que llegaron a robar la caja fuerte de un zoológico en Argentina.
Para llegar hasta esa caja fuerte no había que romper paredes ni partir vidrios de alguna oficina.
Lo que buscaban estaba –nada más y nada menos- que oculto en la jaula de los tigres y hasta allá fueron a dar.
Los delincuentes llegaron al “zoo” el pasado fin de semana, pues la denuncia la hicieron el lunes 28 de agosto de 2023.
Cómo fue el intento de robo en medio de los tigres
Los insólitos hechos se registraron en el parque zoológico Bubalcó, situado en la localidad de Martín Guerrico, provincia argentina de Río Negro.
Se cree, dijo Diario TAG, que “al menos dos personas habrían participado en la maniobra delictiva”, pues mientras uno manipulaba los accesos y buscada, desesperadamente, romper el candado, el cómplice “cantaba la zona” (vigilaba).
El robo, pese a no concretarse, no deja de ser “audaz”.
De acuerdo con Diario Chaco, los asaltantes “tenían conocimiento del sistema de mecanismos del lugar y donde se encontraba la caja fuerte”.
Los sujetos “forzaron el chapón de la puerta doble hoja que daba ingreso a la celda donde estaban los animales”.
Seguidamente, “manipularon el sistema de cables para abrir y modificar los carriles de las compuertas”. Con eso buscaban que los tigres “quedaran aislados de la zona donde se encontraba la recaudación”.
Los investigadores estiman que los asaltantes tenían datos precisos sobre el lugar y la manera en que debían actuar para no ser víctimas de un posible ataque del felino.
Policía a LM Cipolletti
Pese a toda la estrategia y “conocimientos” sobre el lugar, “no se llevaron la recaudación del fin se semana”.
Según Nueva Data, en la celda donde se halla la caja fuerte oculta hay un tigre blanco. “Los ladrones habían podido moverlo y tenían el lugar despejado”.
Al querer avanzar les dio problemas el candado. No pudieron romperlo. Cansados de probar “suerte”, se fueron.
Bubalcó, en su sitio web, indica que tienen más de tres décadas en la Patagonia y se describen como un parque destinado a la conservación de especies en peligro de extinción.