Por disposición del Gobierno Nacional, la Comisión de Tránsito clausuró cerca de 100 radares de velocidad, instalados en varias provincias del país.
La medida se tomó en vista que dichos dispositivos fueron instalados de forma ilegal, no brindaban garantía técnica alguna, y solo servían para sancionar a los conductores, con enormes beneficios para unas pocas empresas.
- LEER TAMBIÉN: Gobierno reconoce irregularidades de “radares vacunadores” y anuncia posibles sanciones
- LEER TAMBIÉN: Presidente de la Asamblea propondrá eliminar los radares de tránsito
Los radares, desde ahora, solo podrán reportar la velocidad de los vehículos de forma referencial, pero en modo alguno tendrán la facultad de imponer multas, como antes.
En Santa Elena
En la provincia de Santa Elena, el nuevo gobernador, Renato Iturralde, clausuró de forma oficial los controles situados en la Ruta del Spondylus, entre las comunas de Capaes y San Pablo.
Dichos equipos, de acuerdo a los reportes, marcaban velocidades irreales, y aplicaban multas exorbitantes.
Los dispositivos fueron instalados gracias a un convenio, entre los municipios de Salinas y Santa Elena y la empresa SEVICE, que se beneficiaba de un alto porcentaje de las multas.
En Manabí
Mientras tanto, en la provincia de Manabí, la misma suerte corrieron otros 21 radares, que también operaban de forma ilegal, perjudicando a cientos de conductores.
Las inspecciones establecieron que los mismos, no cumplían con las especificaciones técnicas exigidas. Además, estaban ubicados en curvas o pendientes, lo cual no es permitido.
La clausura fue realizada por la directora provincial de la CTE, Karina Cevallos.
En Guayas
Asimismo, en Guayas dejaron de operar 36 radares.
Los equipos fueron clausurados personalmente por el director provincial de la CTE, Wilmer Córdova, tomando en cuenta que los equipos no cumplían las especificaciones técnicas, exigidas por la normativa vigente.
Entre las irregularidades detectadas se incluyen la falta de señalización adecuada, y la ubicación inadecuada.
De la cifra mencionada, 13 radares estaban en la zona de Playas. Fueron instalados mediante un convenio entre el Municipio y una empresa privada, que quedó ya sin efecto.
El propio alcalde tuvo que clausurar los dispositivos, que ya no podrán emitir multas.
En El Oro
Parecida situación se vivió en El oro, donde 9 radares más fueron clausurados.
La disposición fue ejecutada por el director Provincial de la CTE, Jenner Franco, debido a que, al igual que en las demás provincias, los dispositivos no cumplían las especificaciones técnicas.
Los conductores denunciaron que recibían enormes multas, pese a que no excedían los límites de velocidad.
En Los Ríos
Y en Los Ríos pasó lo mismo con 21 radares, igualmente clausurados por los abusos cometidos contra los usuarios.
El director Provincial de la CTE, Mirko Rodic, procedió al cierre de los equipos, con el sello respectivo en cada uno.
