El Universo .- El privado de libertad herido durante su arresto también murió en una casa de salud.
Esmeraldas
Esta madrugada se confirmó el fallecimiento de Fausto Valencia, quien fue víctima de un ataque terrorista la tarde de este martes, 9 de enero, en medio del caos que las bandas delictivas causaron a nivel nacional.
Individuos aún no identificados le echaron gasolina a la víctima cuando esperaba el cambio de luz de un semáforo y le prendieron fuego mientras estaba detrás del volante.
Valencia, de 65 años, sufrió quemaduras en el cuerpo y fue ayudado por personas que lograron rescatarlo con vida del automotor incendiado. En una camioneta fue trasladado a un sanatorio, donde horas después murió en la unidad de cuidados intensivos.
Colaboraba como portavoz en el programa Narcóticos Anónimos (NA) de Esmeraldas, en la recuperación de personas con adicciones.
Sus compañeros escribieron notas de condolencias por lo sucedido a Valencia.
Reo también murió
Producto de las heridas, al parecer por impactos de bala, falleció el privado de libertad que junto con otros tres reclusos evadieron las seguridades del Centro de Privación de Libertad Esmeraldas n.º 2, ayer martes.
La información fue confirmada por la Fuerza de Tarea Conjunta Esmeraldas (FTCE) y Norman Cano, comandante de la Zona Especial 1 de la Policía Nacional.
Los individuos fueron ubicados en la parroquia rural Vuelta Larga, a unos 7 kilómetros del centro penitenciario.
Uno de los privados de libertad fue herido durante la persecución, pero se encontraba estable, según se informó. El herido fue trasladado a una casa de salud y horas después falleció.
Los otros tres recapturados fueron ingresados de nuevo al reclusorio. El comandante policial Julio Vásquez, de la Subzona 8, espera el informe oficial del Servicio de Atención Integral a Personas Privadas de Libertad (SNAI) de cuántos internos se fugaron de este centro carcelario.
Hasta anoche se negociaba la liberación de ocho funcionarios del Servicio de Vigilancia Penitenciaria y posiblemente del director de la cárcel de Esmeraldas, que estaban retenidos por los privados de libertad que se amotinaron en respaldo a las protestas en otras cárceles del país.
“Buscamos un desenlace pacífico y sin incidentes para liberar a los funcionarios penitenciarios”, indicó Vásquez.
En el Centro Privado de Mujeres ubicado en Santas Vainas también realizaron una medida de hecho, la tarde del martes. Militares y policías llegaron al sector, donde se originó un cruce de balas con desconocidos desde el barrio Vista al Mar.
