Lo cierto es que lograr una acertada conducción de las relaciones internacionales no solo dependerán de ella, sino también del equipo que conforme.
El docente Carlos Espinosa comentó que las destrezas ejecutivas de Sommerfeld corresponden a un perfil acorde con un “gobierno de empresarios”.
A su criterio, “no es óptimo que nombre a una persona sin experiencia en el ámbito diplomático para ese cargo”, porque falta un conocimiento de los lenguajes y protocolos diplomáticos, así como un desconocimiento de cómo funciona la Cancillería; no obstante, aquello no significa que no tendría un buen desempeño, aclaró.
Espinosa apuntó que la agenda de Sommerfeld debe tener como prioridad alcanzar acuerdos de cooperación en materia de seguridad y migración con otros países y organismos multilaterales, y avanzar convenios comerciales.
Lo que devela la designación de la empresaria es que, bajo lo que Daniel Noboa entiende como política exterior, “el presidente electo va a necesitar alguien que le ayude a traer inversiones”, comentó Santiago Carranco, coordinador del laboratorio de relaciones internacionales de la Universidad Internacional del Ecuador.
Observó que el plan de gobierno no deja ver de manera detallada qué línea va a seguir el nuevo régimen en cooperación regional, cuál será su postura específica en el Consejo de Seguridad de la ONU, o con Rusia. Además, definir una postura con el conflicto en Gaza, entre otros.
Será importante conocer los objetivos que se plantee la nueva autoridad, tomando en cuenta que faltan por concretarse el acuerdo comercial con China, que el acuerdo con Costa Rica fue rechazado por la Corte Constitucional y que está en proceso el acuerdo con Corea del Sur.
Los acontecimientos internacionales pueden cambiar de manera considerable a cualquier instante, sobre todo cuando existen conflictos armados, lo que puede traer repercusiones en la economía global, como por ejemplo en el precio del petróleo y otras materias primas.
“Tener un servicio exterior probo, muy bien armado y técnico es absolutamente primordial”, opinó Esteban Santos, abogado internacionalista y docente universitario, quien señaló que ante los posibles efectos económicos el perfil de Sommerfeld puede aportar.
“Ella tiene una necesidad de estar extremamente bien asesorada, porque el pilar, sino el más importante con el que va a tener que anclarse el gobierno de Noboa, hasta ver qué pasa con su consulta popular, con la Asamblea, el mundo hacia afuera va a ser su carta de presentación. Así que la canciller va a tener un rol realmente protagónico”, comentó.
El objetivo de conseguir la exención del visado Schengen será una misión complicada, que se arrastra desde que Ecuador decidió no ingresar desde un inicio en el acuerdo comercial que la Unión Europea firmó con Colombia y Perú, que incluyó la exención de la visa.
No depende exclusivamente de tener el apoyo de algunos países europeos, como ya ha dicho Daniel Noboa en cuanto a que el gobierno español impulsará el tema en el Parlamento Europeo, señalaron los expertos.
Hay que resolver aspectos internos de Ecuador, indicaron los analistas, que atraviesan por la situación económica, estabilidad jurídica y la alta salida de compatriotas, cuyas solicitudes de visa para ingresar a la Unión Europea han sido rechazadas en gran cantidad por presentar anomalías y hasta documentos falsos; lo que alerta de un riesgo de flujo migratorio irregular.
Lo último merece una revisión exhaustiva por parte de diferentes carteras de Estado sobre las actividades de los negocios y personas que ofrecen “tramitar y preparar” los requisitos para las solicitudes, anotó Santiago Carranco.
Adicionalmente, un factor externo que está fuera de las manos del país es la crisis migratoria que enfrenta Europa, con la masiva llegada de ciudadanos en condiciones irregulares, especialmente provenientes de países africanos.