La alcaldesa de la ciudad ecuatoriana de Guayaquil, Cynthia Viteri, presentó el martes un recursos legal para exigir que la farmacéutica Pfizer y el Ministerio de Salud le permitan adquirir vacunas contra el COVID-19 para su jurisdicción.
Viteri solicitó el mes pasado al presidente Lenín Moreno autorice la compra directa de vacunas para inmunizar a un millón de personas en la ciudad, que el año pasado soportó uno de los peores brotes de coronavirus de la región, y dijo que había comenzado negociaciones con los laboratorios.
Tanto el Ministerio de Salud como la filial de Pfizer en Ecuador, la única que hasta el momento ha concretado la entrega de dosis al país andino, han dicho que las vacunas se negocian directamente con los gobiernos centrales de cada nación.
“Hoy hemos presentado una medida cautelar que busca que la compañía Pfizer, sobre todo sus filiales radicadas en el Ecuador, y el Ministerio de Salud, permitan que nosotros tengamos las vacunas que Guayaquil requiere”, dijo Viteri en un comunicado.
“Es la primera vez que un Municipio de una ciudad pequeñita, de un país pequeñito de Latinoamérica demanda a una empresa transnacional como Pfizer, a través de una medida cautelar por abuso al no permitir vendernos las vacunas a un gobierno local, no somos particulares”, insistió.
El gobierno ha tenido problemas para avanzar con agilidad en su programa de vacunación. Hasta el sábado había vacunado a unas 120.000 personas, especialmente médicos y ancianos, en medio de duras críticas por el proceso que ha beneficiado a personas por fuera del plan original.
Viteri justificó el recurso legal con un incremento en esta semana a 13 muertes diarias por coronavirus en la ciudad. Ecuador registra más de 300.000 contagios y 16.259 muertes confirmadas y probables de COVID-19, según datos oficiales.
El gobierno ha dicho que tiene negociado 20 millones de dosis de vacunas con las farmacéuticas Pfizer, la británica AstraZeneca, la china Sinovac y la iniciativa COVAX, liderada por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
