Guayaquil comenzó la semana sin transporte.
La Federación de Transportistas Urbanos del Guayas (Fetug) decidió no laborar de forma indefinida, hasta que la Alcaldía de Guayaquil acepte incrementar los pasajes de 30 a 45 centavos.
Sus dirigentes exigen el mismo trato que el servicio Metrovía, cuyos operadores reciben 45 centavos, aunque para el público se mantiene la tarifa en 30. Los otros 15 son asumidos por el Municipio.
La Fetug también clama por una mejoría en la seguridad, pues de forma permanente los micros son asaltados.
- Leer también: Transportistas de Guayaquil ven difícil acceder a condiciones para alza de pasajes
- Leer también: Alcalde de Guayaquil confirma que alza de pasajes no afectará a usuarios
En Guayaquil el servicio de transporte está concesionado al cabildo, por lo cual tiene la potestad de resolver sobre los precios que se cobran en el ámbito urbano.
La paralización provoca enormes problemas a cientos de miles de personas, que no pueden llegar a tiempo a sus trabajos y demás ocupaciones, debido a la falta de buses. Los pocos que se atreven a salir son apedreados de forma vandálica por sus propios compañeros, o les ponchan las llantas.
Hasta ahora se han reportado al menos 7 unidades, atacadas por integrantes del propio gremio. Hay 2 personas detenidas en torno a estas denuncias, que serán tramitadas en el ámbito penal. Circulaban en un auto con placas adulteradas, atacando a los micros que sí laboran.
Alcaldía no aceptará presiones
La respuesta del alcalde, Aquiles Álvarez, no se hizo esperar. Anunció que no cederá ante estas presiones, y que no subirán las tarifas, al menos hasta que mejore sustancialmente el servicio.
Esto significa la compra de nuevas unidades, dotadas de aire acondicionado, y dar de baja otras que están en malas condiciones.
Asimismo, dejó en claro que no aceptará la medida de presión, ya que la ley prohíbe paralizar servicios básicos, incluyendo el transporte.
Sus críticas apuntan a Christian Sarmiento, presidente de la Fetug, a quien señala como promotor del paro.
Demasiada espera
Por su parte, en una rueda de prensa, Sarmiento señaló que llevan largo tiempo en la justa demanda de un aumento en los pasajes.
Además, acusó al alcalde Álvarez de “esconderse”.
Como medida de respuesta, la Agencia de Tránsito Municipal de Guayaquil (ATM), anunció la suspensión de 19 cooperativas, por suspender sus labores. Es decir, no podrán trabajar, ya que se trata de un servicio básico que no puede ser detenido.
La sanción podría ser de hasta 8 salarios básicos unificados, es decir de 3.680 dólares.
Debido a este paro, multitud de vehículos particulares realizan el servicio de manera informal, pero cobrando de 50 centavos a 1 dólar por pasajero. Los taxistas, asimismo, estarían aprovechando la situación para cobrar hasta el doble del valor de las carreras.
La situación es especialmente compleja en la Terminal Terrestre, donde los pasajeros que llegan de otros puntos del país, no encuentran transporte para dirigirse a sus destinos, excepto los ya mencionados taxis, pues muy pocos buses urbanos laboran.