El presidente de la República, Daniel Noboa, encabezó la entrega de los llamados “sellos violetas”, a 15.500 niños ecuatorianos, que cumplen los 1.000 primeros días de vida.
El acto se realizó en la Universidad “Espíritu Santo”, de Guayaquil, con la participación de varios ministros de Estado.
Durante los 1.000 días, los pequeños han recibido servicios integrales para la prevención y la reducción de la desnutrición crónica infantil.
El plan representa una inversión de 350 millones de dólares, y es coordinado por la Secretaría Técnica de “Ecuador Crece Sin Desnutrición Infantil”.
“Es una oportunidad única de influir en el desarrollo inmunológico, metabólico y sobre todo el neurológico. En este periodo, el cerebro de los niños crece con asombrosa rapidez. Estamos evitando que estos niños y niños tengan desnutrición crónica infantil y además se convierten en un futuro prometedor para el país”, señalaron las autoridades.
Para el presidente Noboa, este logro es un testimonio de esperanza para el país, y uno de los compromisos más sagrados del Gobierno Nacional.
Según el UNICEF, la desnutrición crónica infantil sigue afectando en el Ecuador. La prevalencia media en Sudamérica es del 10% o menos, mientras en nuestro país ese índice se acerca al 20%. La meta es reducirlo a corto plazo al 18%.
Además de la desnutrición, también está el riesgo de la malnutrición, asociada a problemas de obesidad y sobrepeso.
