Labor de inteligencia permitió que las Fuerzas Armadas, descubrieran un bar clandestino que operaba en el norte de Guayaquil.
Los militares establecieron que en un domicilio de la ciudadela Kennedy, funcionaba un local de diversión camuflado, donde se vendían bebidas alcohólicas y había música.
El bar trabajaba toda la noche, pese a que rige el Toque de Queda desde las 00h00 hasta las 05h00, como parte del Estado de Excepción que extendió el gobierno nacional.
Con la información necesaria, los uniformados irrumpieron en el local y confirmaron el ilícito.
En total había cerca de 30 personas en el bar clandestino, bailando y bebiendo, cuando por ley deberían estar en sus domicilios.
Los infractores fueron detenidos y puestos a órdenes de un juez, que deberá establecer la sanción que establece la normativa. Sería prisión y multa.
En tanto, el domicilio que funcionaba como bar fue clausurado, y sus propietarios también recibirán las sanciones respectivas.