La defensa del exasambleísta social cristiano, Pablo Muentes; de su primo, Fausto Alarcón; y del ex juez del Guayas, Reinaldo Cevallos, detenidos por sus vínculos en la red de corrupción del llamado “Caso Purga”, solicitó que les brinden medidas alternativas.
Muentes está señalado como cabecilla de la organización, que gestionaba beneficios judiciales para el narcotraficante Leandro Norero y su círculo. En tanto Alarcón figura como testaferro de algunos de sus bienes, y Cevallos, quien tiene prisión domiciliaria por ser adulto mayor, era uno de los operadores que facilitaba sorteos y fallos favorables.
Durante la audiencia ante el juez Javier de la Cadena, de la Corte Nacional de Justicia, los abogados de los 3 implicados, del total de 11 capturados por este proceso, pidieron que se cambie la prisión preventiva y el arresto domiciliario.
En sus intervenciones, los defensores alegaron que sus clientes tienen problemas de salud, y cuestionaron las objeciones contra sus manejos financieros. Por ejemplo, que la empresa de sánduches de Muentes, no justificara la compra de mansiones y terrenos.
Sin embargo, la Fiscalía se mostró en contra del pedido, para garantizar que se presenten al juicio en su contra.
Para el defensor del juez Cevallos, su representado “no resolvió a favor de alias Fito, sino que solo dirimió competencias”.
El juez todavía no resuelve en torno a este pedido.
