El Universo .- Desde 2021 existe un llamado a juicio para cinco personas acusadas de una delincuencia organizada dada en la comercialización de insumos dentro de la pandemia.
Pese a que ya por cinco ocasiones, por distintas razones, no se ha podido instalar la audiencia de juicio por delincuencia organizada contra el expresidente Abdalá Bucaram Ortiz, su hijo Jacobo Bucaram Pulley y tres personas más acusadas de participar en irregularidades en la comercialización de mascarillas y 21.000 pruebas rápidas para diagnosticar COVID-19 en pandemia, ahora la traba para avanzar con el juzgamiento radica en que se debe designar un juez titular que reemplace a la presidenta de la sala, quien renunció al cargo.
El último diferimiento, el quinto dentro de esta causa, se dio a finales de mayo pasado. Uno de los jueces parte del Tribunal informó que asistirá a otras diligencias entre el 5 y el 9 de junio pasado, semana que inicialmente se definió para el juicio.
En octubre de 2021 el exagente de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) de Quito Leandro Berrones, el israelí Sheinman Oren y la peruana Orietta Isabel Marengo fueron llamados a juicio por el juez Geovanny Freire, y, para diciembre de ese mismo año, Abdalá y Jacobo Bucaram. Marengo no ha sido convocada a la etapa de juzgamiento, debido a que se mantiene como prófuga de la justicia pese a que fue detenida el 10 de marzo de 2022 en Lima, Perú, por agentes de la Interpol (Policía Internacional, por sus siglas en inglés) de ese país.
El juez provincial Daniel Tufiño asumió temporalmente el caso luego de la renuncia de la jueza Silvana Velasco. Hace unos meses, ante una solicitud de diferimiento hecha por la Fiscalía, Tufiño explicó que a la compleja situación de agenda de los demás magistrados se suma desde diciembre de 2022 la renuncia de la jueza Velasco, tema que se indicó no ha sido solucionado desde el Consejo de la Judicatura (CJ) nombrando un juez o jueza que asuma la titularidad de ese despacho y por ende sus casos.
“Este tema afecta el normal despacho de las causas y atención de los requerimientos de los usuarios”, dijo Tufiño. Catterine Vásquez y Pablo Cello son los jueces que completan el Tribunal de Juzgamiento en el que temporalmente el ponente es el juez Tufiño.
La fiscal del caso, Lidia Sarabia, el 9 de junio pasado presentó un escrito al Tribunal indicando que “la causa se ha dilatado considerablemente” y pide se señale un nuevo día y hora para que tenga por fin lugar la etapa de juicio.
“Al respecto, se debe indicar que la designación de un nuevo juez o jueza titular frente a la ausencia definitiva de la jueza ponente en la presente causa es exclusiva del CJ, lo cual hasta la presente fecha no ha sucedido, generando inconvenientes y retrasos no solo en esta causa. En decreto inmediato anterior se dispuso oficiar a dicho órgano administrativo de la Función Judicial a fin de que se realicen las gestiones necesarias para nombrar el reemplazo definitivo de dicha juzgadora, lo cual se ha cumplido mediante oficio del 6 de junio de 2023, por lo tanto, el nuevo señalamiento de la audiencia de juicio se atenderá de forma oportuna una vez que se nombre al juez o jueza titular del despacho que conforme de forma definitiva el Tribunal”, se explicó en la providencia.
Al momento se han hecho conocer la prueba pericial y testimonial de la que harán uso cada una de las partes procesales ya en el juzgamiento. Respecto a esto último, por varias ocasiones, ya se han emitido los oficios respectivos para que asistan quienes son convocados por acusados y acusadores.
La audiencia se dará de forma presencial en una de las salas de la Unidad Judicial Norte, ubicada en Quito. Audios, pericias y cotejamientos serían parte de la prueba que mantiene contra los acusados la fiscal Sarabia y a la que la califica de “contundente”.
En esta causa por delincuencia organizada, desde el 1 de junio pasado, el israelí Sheinman Oren usa grillete electrónico. La disposición la dio un Tribunal de Garantías Penales de Pichincha que lleva el proceso penal.