No se pudo instalar la audiencia de juicio, dentro del denominado “Caso Nene”.
El mismo involucra a Sebastián Barreiro, hijo de la vicepresidenta Verónica Abad, y a uno de sus asesores, por el delito de tráfico de influencias.
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Abogado multado
La diligencia no fue posible porque el abogado defensor de Barreiro no se presentó, pese a estar debidamente notificado. Este incumplimiento le valió una multa impuesta por el tribunal, equivalente a 2 salarios básicos unificados. Es decir, 940 dólares.
La audiencia iba a realizarse en una de las salas del Complejo Judicial Norte, de Quito. Los magistrados establecerán la nueva fecha.
Diezmos

De acuerdo a las investigaciones de la Fiscalía, el hijo de la segunda mandataria exigía diezmos a empleados de la Vicepresidencia, a cambio de mantenerlos en funciones.
A uno de ellos, incluso, lo obligó a firmarle una letra de cambio, para asegurarse de que le pague.
Una vez detectado el delito, Barreiro fue apresado y recluido en “La Roca”, de Guayaquil, la cárcel de máxima seguridad del país. Días después salió, tras pagar una fianza de 20.000 dólares.
Su argumento ha sido que se trata de una persecución política, y que existe un plan para matarlo. Pero no ha presentado pruebas que demuestren su inocencia.