La Asamblea no dio la autorización requerida, para que la Corte Nacional enjuicie penalmente a la vicepresidenta de la República, Verónica Abad.
La segunda mandataria fue involucrada en el llamado “Caso Nene”, en el cual el principal acusado es su hijo, Francisco Barreiro. De acuerdo a las investigaciones, Barreiro, exigía diezmos a empleados de la Vicepresidencia, a cambio de mantenerlos en sus cargos.
La Fiscalía estableció que Abad cometió el delito de concusión, pero por su fuero de corte se establece que el Parlamento debe dar el visto bueno para procesarla, lo cual no ocurrió.
De los 133 asambleístas presentes, 74 rechazaron la moción presentada por el correísta Leonardo Berrezueta, para permitir el enjuiciamiento penal, A favor, en cambio, hubo 41 votos, y los 18 restantes se abstuvieron.
De acuerdo a la ley, se requerían 92 votos para dar luz verde al juicio.
La sesión parlamentaria fue virtual, y por órdenes del presidente, Henry Kronfle, se transmitió por redes sociales. Originalmente se había previsto que fuera reservada, lo cual generó fuertes críticas.
Durante la misma, se leyó el pedido de la jueza de la Corte Nacional de Justicia, Daniella Camacho, para vincular a la vicepresidenta Abad, con los fundamentos legales respectivos. Pero el resto del oficio, por su carácter reservado, no fue difundido.
Pasadas las 14h00, Berrezueta propuso autorizar el enjuiciamiento penal, con el resultado negativo ya mencionado. Una segunda moción, planteada por Gisella Molina, para negar el enjuiciamiento penal, corrió la misma suerte.
La decisión de la Asamblea impide que Abad sea procesada penalmente, mientras ocupe el cargo de vicepresidenta de Ecuador. No obstante, el delito de concusión es imprescriptible, por lo cual, cuando termine su periodo, deberá responder.
