La nueva presidenta de México, Claudia Sheinbaum, lanzó un nuevo llamado a Ecuador, para que libere al exvicepresidente Jorge Glas, y le otorgue un salvoconducto que le permita salir del país.
Glas está recluido desde abril pasado en la Cárcel “La Roca”, de Guayaquil, la de mayor seguridad del Ecuador, tras ser arrestado dentro de la embajada mexicana en Quito, que le había concedido resguardo.
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El exmandatario tiene pendiente de cumplir 2 sentencias por actos de corrupción, y además tenía en su contra otra orden de captura, por presunto peculado en el caso “Reconstrucción de Manabí”.
Seguirán la demanda
Sheinbaum, posesionada el pasado 1 de octubre, advirtió que su país seguirá con la demanda ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), por la incursión policial a su embajada.
Durante una rueda en Palacio Nacional de la Ciudad de México, la mandataria insistió en los pedidos de liberación de Glas, y en la emisión de un salvoconducto que le permita salir del Ecuador.
La incursión policial trajo la rotura de las relaciones diplomáticas entre ambas naciones, y derivó en un cruce de demandas ante la CIJ.
Glas no es un perseguido político
El gobierno ecuatoriano ha señalado varias veces que el asilo mexicano a Glas no procedía, por tratarse de una persona perseguida por delitos comunes y no políticos.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), anunció que visitará al exvicepresidente en prisión, para constatar su supuesta afectación de salud.
Las autoridades carcelarias ecuatorianas han aclarado que Glas se encuentra bien atendido, y que toma las medicinas que le ordenan. Incluso mencionan que sus implantes capilares se mantienen firmes.
