La cúpula policial sabía del inminente atentado contra el entonces candidato presidencial, Fernando Villavicencio, y no tomó las precauciones necesarias.
Así lo afirmó Erwin Romero, abogado del capitán Cristian Cevallos, quien era el responsable de la seguridad de Villavicencio.
Cevallos acudió este jueves a la Fiscalía a rendir su declaración, dentro del proceso que investiga el crimen.
Tras la diligencia, Romero explicó que un día antes del asesinato, la Policía fue alertada del mitin político al que acudiría el postulante presidencial, y de que existía un alto riesgo de un atentado. Sin embargo, no se tomaron acciones especiales.
Incluso, dijo, el ex director de Inteligencia no tomó medidas para proteger a Villavicencio. Hasta fraguaron documentos falsos en contra de su cliente, para sancionarlo de forma ilegal. Se inventaron una orden de servicios, para justificar que sí enviaron personal y medios logísticos para dar seguridad, lo cual es falso.
Cevallos envió más de 100 partes a Inteligencia y a la Dirección Nacional de Protección Ciudadana, para que le proporcionen vehículos adecuados para dar seguridad a Villavicencio, así como chalecos, medios de comunicación, municiones y armas largas. Sin embargo, nada de eso le dieron.
Para el jurista, la cúpula policial es responsable de lo que pasó con el candidato, pero ahora quiere culpar al oficial a cargo.