Analistas económicos expresaron su temor por los recientes informes del Banco Central, que supuestamente advertían de una posible recesión para los próximos meses.
Sin embargo, el viceministro de Finanzas, Daniel Falconí, aclaró que las cifras no revelan necesariamente que hay una crisis en camino.
Consultado por “Punto de Orden”, el funcionario explicó que estos indicadores deben ser tomados como un reto, y analizados en un contexto general.
Falconí recordó que el actual gobierno, desde su primer día, trabajó en obtener mayores ingresos y fuentes de financiamiento. Y gracias a estas gestiones –aumento de ciertos impuestos y créditos internacionales frescos- se están cubriendo muchas deudas pendientes, dejadas por las anteriores administraciones.
Como resultado, dijo, la segunda mitad del año el país tendrá los recursos necesarios, para dar paso a un despliegue de la inversión.
El viceministro explicó que desde el pasado mes de mayo, Ecuador empezó a recibir importantes desembolsos de organismos internacionales de crédito, que permiten paulatinamente pagar a los proveedores del Estado.
A ellos se cubrieron 500 millones, y en cuanto al IESS, el Estado está al día en el pago del 40% de los fondos que corresponden a pensiones jubilares y otros montos, que suman durante el 2024 cerca de 1.400 millones.
Asimismo, hace pocos días se renegociaron las obligaciones pendientes con el sector de la salud, que databan del año 2021. A través de este acuerdo, se aportaron 50 millones más.
Mayores ingresos
Si bien los préstamos internacionales ayudan, Falconí también destacó la importancia del incremento en las recaudaciones, gracias a los impuestos creados por la Ley de Conflicto Armado Interno.
Estos gravámenes, anotó el funcionario, permitieron incrementar los ingresos tributarios en un 7%, en comparación al 2023.
Para el viceministro, estas cifras revelan que la economía nacional no caerá en recesión, pues existe un gobierno responsable que impulsa actividades productivas.
