Sí habrá procesiones durante la Semana Santa, pero bajo determinadas condiciones. Un acuerdo entre la Arquidiócesis de Guayaquil, la Alcaldía, la Intendencia de Policía y el Cuerpo de Bomberos, estableció los parámetros en que podrán realizarse estos tradicionales actos religiosos. De acuerdo a lo establecido, el Domingo de Ramos se efectuará la procesión Jesús del Gran Poder, en su recorrido normal. Mientras, el Viernes Santo habrá permiso para la del Cristo del Consuelo, y sólo en cada una de las parroquias. No se permitirán las procesiones zonales. Para ello, la Arquidiócesis de Guayaquil asumió los siguientes compromisos: Observar las instrucciones de las autoridades pertinentes. Establecer los horarios del inicio y del final de las procesiones de tal manera, que las autoridades puedan ofrecer el contingente adecuado. Reducir las distancias y los tiempos de recorrido de las procesiones. Motivar a los feligreses para que mantengan la calma y la cordura durante la procesión, no se detengan en las procesiones, no lleven niños y personas con discapacidades, y se hidraten durante el trayecto debido a las altas temperaturas. Invitar a los feligreses que lleven banderas o pañuelos blancos como signo de reconciliación y de paz. Por la Arquidiócesis compareció su presidente, monseñor Luis Gerardo Cabrera Herrera.

El alto nivel de inseguridad que vive el país, a pesar de la declaratoria del Estado de Excepción, podría afectar a la tradicional procesión del Cristo del Consuelo, que se desarrolla todos los Viernes Santos. La caminata, que parte de la Iglesia del Cristo del Consuelo, en el suroeste de Guayaquil, atrae a miles de fieles, que llenos de fe participan en todo el recorrido. Funcionarios del Municipio y del Gobierno mantienen permanentes reuniones, a fin de establecer si la procesión puede realizarse, o si podría ser escenario de actos de violencia de las bandas delictivas. Incluso con una numerosa presencia de policías y militares, habría el riesgo de robos y desmanes de pandillas. Por lo pronto, ambas partes esperarán el pronunciamiento de las autoridades religiosas, y el plan que ha elaborado para este año. En caso de no emitirse el permiso respectivo, los organizadores analizan alternativas más cortas, como caminatas en el sector Cisne 2.