La Corte Nacional de Justicia (CNJ) completa la primera semana del proceso por peculado, dentro del denominado “Caso Reconstrucción de Manabí”.
En esta causa están sindicados el exvicepresidente de la República, Jorge Glas, y el exsecretario del Comité de Reconstrucción, Carlos Bernal, actualmente prófugo.
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El proceso se ha topado con algunos contratiempos, debido a supuestos quebrantos de salud de Glas.
Testimonios

La Fiscalía sostiene que el exvicepresidente, a cargo de la reconstrucción de Manabí luego del terremoto de abril del 2016, utilizó los fondos recaudados en el aumento de impuestos a obras que no eran prioritarias.
Los cálculos sostienen un posible perjuicio, por más de 200 millones de dólares.
Durante el juicio, quedó en evidencia que empresas vinculadas a Bernal y a su esposa, recibieron millonarios contratos del Comité de Reconstrucción. La defensa del exfuncionario afirma que eso no es un delito.
También fue descubierto que fueron Glas y Bernal, quienes elaboraron la lista de proyectos a ejecutarse, sin considerar en nada la necesidad de la provincia.
Las dolencias del exvicepresidente
Las audiencias tuvieron un par de interrupciones, debido a quejas de la defensa del exmandatario sobre su condición de salud.
Los abogados de Glas denunciaron que sufrió descomposiciones, que obligaron a brindarle atención médica. Los profesionales lo estabilizaron, y afirmaron que está en condiciones de continuar con el proceso penal.
Pese a sus permanentes pedidos, el tribunal de la CNJ que lleva la causa, rechazó el pedido de un nuevo examen siquiátrico, o de ordenar el traslado de Glas a un hospital, como es su deseo.
Aunque las pruebas determinaron que sufre de ciertas afectaciones mentales, también revelaron que finge muchos de los síntomas, para tratar de salir de prisión.