Una habitación con aire acondicionado y un baño son algunas de las infraestructuras que el ejército israelí mostró este miércoles en un túnel utilizado por Hamás y escondido bajo el hospital Al Shifa, en la ciudad de Gaza, reducida a escombros y con civiles aterrorizados huyendo hacia el sur de la Franja.
El establecimiento médico fue el foco de varias semanas de combates, ya que el ejército israelí estaba convencido de que el movimiento islamista palestino almacenaba allí armas y tenía un centro de mando, algo que Hamás siempre negó.
Una veintena de periodistas fueron invitados a visitar el lugar al amanecer. Las fotos, videos y entrevistas publicadas fueron todas sometidas a revisión del ejército israelí, contaron corresponsales de las agencias EFE y AFP.
Cables eléctricos visibles, un paisaje urbano en ruinas, vidrios destruidos. Algunos metros bajo tierra, un túnel estrecho.
“Es muy largo”, asegura el coronel Elad Tsury, comandante de la 7ª brigada. “Este túnel va de la ciudad hasta el hospital”, asegura, conduciendo a los periodistas a una cocina pequeña con un fregadero, baños y una pieza con dos camas de metal y una aireación.
Cuando quieren protegerse, los combatientes de Hamás “descienden, utilizan los hospitales como escudos humanos y pueden quedarse allí mucho tiempo”, agregó el militar.