Europa se le sigue atravesando a este Barcelona de los líos. El reseteo del club tras la gestión de Bartomeu y la posterior salida de Messi ha provocado más desgracias que alegrías. A nivel nacional parece haber reconducido la situación, pero aún no está para asomarse de nuevo por Europa. El Manchester United fue mejor en el Camp Nou y los de Xavi deben dar por bueno el empate pese a las ocasiones finales que tuvieron. Old Trafford vivirá otra bonita batalla en siete días. Una nota positiva del equipo azulgrana fue que los jugadores supieron aislarse de la bochornosa situación a nivel institucional que vive el club.
El Barça de los últimos tiempos no sale de una y ya está metido en otra. Al punto de que vamos a tener que diferenciar el vestuario de lo institucional a la hora de escribir del club. Cada vez queda más claro que los jugadores no tienen culpa de las acciones de sus dirigentes. No son dignas de un club como el catalán. Hay tanto ruido fuera que todo un partidazo como el que le medía al Manchester United perdió algo de protagonismo. Las alarmantes informaciones sobre muchos pagos durante muchos años a un cargo del colectivo arbitral para que los árbitros fueran neutrales con el Barça no pueden quedar en saco roto. Puede que no conlleven sanciones deportivas por haber preescrito, pero van a perdurar mucho en nuestro fútbol, que queda marcado. No es para menos.
El Manchester salió mejor en los primeros minutos realizando un par de centros peligrosos sobre el área azulgrana pero el primer aviso serio de gol lo dio Lewandowski con un remate desde cerca que desvió De Gea. Quedó claro enseguida que iba a ser un partido de ida y vuelta, sin especulaciones de ningún tipo. Dos estilos muy parecidos con presión asfixiante para el robo del balón y ataques rápidos que en el caso del United le pudieron poner por delante en el marcador en dos acciones en las que Ter Stegen estuvo sensacional. Primero fue Weghorst -a quien Messi hizo famoso en Qatar por el famoso: ¡Qué mirás bobo!- quien se quedó solo pero no pudo batir al meta alemán y después fue Sancho quien obligó a Ter Stegen a realizar una parada de las suyas cuando el balón se colaba en la meta local.
Al borde del descanso Xavi recibió un mazazo al perder a Pedri por lesión. El canario tiene pinta de que sufre una rotura muscular que le puede tener unas semanas fuera. Y hay que recordar que Busquets también está K.O. Salió Sergi Roberto en su lugar justo antes de que el italiano Mariani mandara a todos al vestuario dando por finalizado un buen primer tiempo. Todo parecía cambiar en el arranque de la segunda parte cuando un córner sacado por Raphinha lo cabeceó a la red Marcos Alonso con la complicidad de Malacia en la marca y de un confiado De Gea. Un emotivo gol que dedicó a su padre, recientemente fallecido. El gol podía dar otro escenario al partido, pero los de Ten Hag no dieron opción empatando sólo dos minutos después gracias a un zapatazo de Rashford que sorprendió a Ter Stegen en su paso. Pocos jugadores hay en mejor forma que el inglés en la etapa post-Mundial.
El Barça acusó el empate y el Manchester no perdonó unos minutos después. De nuevo Rashford fue determinante al irse en velocidad de Raphinha tras un córner sacado en corto y meter un pase mortal al área pequeña que acabó en autogol de Koundé al intentar despejar. Si el 1-1 dolió, el 1-2 fueron palabras mayores y el colegiado italiano perdonó la expulsión a Koundé tras una falta sobre un incomensurable Rashford que se iba solo en busca ante Ter Stegen. El VAR no entró al ser jugada fuera del área. Xavi intentó reconducir el partido con un triple cambio dando entrada a Ansu Fati, Christensen y Balde.
La jugada salió bien porque el Barça consiguió empatar el choque cuando más sufría. Fue gracias a Raphinha, el mejor del Barça en el partido, que hizo un centro envenenado que estuvo a punto de rematar Lewandowski y acabó entrando en la meta de De Gea tras pasar entre las piernas de Shaw. El gol espoleó a los locales, que tuvieron unos minutos de agobio sobre la meta de De Gea que estuvieron a punto de darle la victoria con un mal despeje de Casemiro que acabó en el palo y un paradón del meta madrileño a remate de Ansu Fati. Empate final y todo queda en el aire para Old Trafford.
Fuente: Marca