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Ecuador: diciembre 3, 2024

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Ecuador, diciembre 03, 2024
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Ecuador, diciembre 03, 2024

Se les terminó el internet a reclusos de Cárcel de Cotopaxi

La operación de las Fuerzas Armadas, en la Cárcel Regional de Cotopaxi, se topó con enormes sorpresas. Y esta vez no solo fueron armas, municiones y droga. La más grande fue la serie de instalaciones clandestinas, que permitía a los reclusos disfrutar de un servicio de internet que muchos ciudadanos no tienen. La requisa, que abarcó minuciosamente cada rincón del centro penitenciario, permitió decomisar 5 routers, 800 metros de cable UTP para exteriores, un expansor de internet, 12 interruptores, 3 conversores de fibra, 3 adaptadores de internet y 19 celulares. Adicionalmente, los presos se las habían ingeniado para instalar una antena de televisión satelital. Fuera de este material, los militares hallaron relojes, radios de comunicación, 19 armas blancas, perfumes, cremas, controles remotos, audífonos, y cargadores. Los cables y routers estaban instalados en sitios estratégicos del techo, fuera de la vista. En tanto, otros artículos prohibidos permanecían ocultos en paredes y pisos de las celdas. También en Esmeraldas Parecida operación se realizó en la Cárcel de Esmeraldas, gracias a la irrupción de un fuerte contingente de las Fuerzas Armadas. Tras quedarse sin internet y sin celulares, los reclusos se aglutinaron junto a las paredes de la prisión, y a gritos llamaron a sus familiares para quejarse de esta “violación a los derechos humanos”, como la llamaron. Por esta acción, los militares dispusieron que en la madrugada salieran de sus celdas e hicieras ejercicio, con canciones patrióticas de fondo. Hace unos días, una requisa similar se efectuó en la Cárcel de Machala. Aquí también había varias instalaciones clandestinas de internet, que fueron desbaratadas.

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Militares hallaron todo un arsenal en la Cárcel de Cotopaxi

Un nuevo registro en la Cárcel Regional de Cotopaxi, realizado por elementos de las Fuerzas Armadas, arrojó más sorpresas. Pese a los permanentes cateos, prácticamente en todos los operativos se encuentra material prohibido y peligroso. Esta vez se hallaron un fusil, una subametralladora, 7 pistolas, 4.591 municiones, 18 alimentadoras, 2 granadas fragmentarias y 2 explosivos. Asimismo, el registro detectó cierta cantidad de droga, así como teléfonos celulares. El material estaba oculto en paredes y pisos de las celdas, que habían sido agrandadas por los reclusos para esconder sus artículos.

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Los Lobos ‘calientan las calles’ tras operativos en cárceles de Turi y Cotopaxi

Primicias .- Los autores de dos coches bomba que estallaron en Quito, la noche del 30 de agosto, serían Los Lobos, organización criminal que controla las cárceles de Turi y Cotopaxi.   Fueron casi cinco horas de angustia en Ecuador, cuando dos coches bomba explotaron en sectores céntricos de Quito, en Pichincha, y dos más en los cantones Pasaje y Machala, en El Oro, entre la noche del 30 de agosto y madrugada del 31.   Estos atentados, uno de ellos registrado cerca de una oficina del Servicio Nacional de Atención a Privados de Libertad (SNAI) en Quito, serían la reacción de Los Lobos a los operativos en las cárceles de Turi, en Azuay, y de Cotopaxi, controladas por esta organización criminal.   El mensaje al SNAI sería directo: “Paren los operativos y traslados carcelarios”. De hecho, los presos en Turi retaron a los uniformados a entrar a la cárcel. “No tenemos miedo, somos Los Lobos”, gritaban los detenidos desde los techos de complejo penitenciario, donde incluso retuvieron a policías y guías penitenciarios. En el de Cotopaxi, las puertas de las celdas están marcadas por figuras de lobos negros. Aquí, el exlíder chonero Leandro, ‘El Patrón’, Norero fue asesinado por esta banda en octubre de 2022.   El factor común de los ataques múltiples es el uso de cilindros de gas que los delincuentes ubican en vehículos robados horas antes, los cuales contienen mechas y explosivos. Un coche bomba explotó en los exteriores de unas oficinas de la SNAI, en la avenida 12 de Octubre entre Foch y Wilson, en Quito, el 31 de agosto de 2023. API Además, las explosiones ocurrieron en Pichincha y en El Oro, provincias en las que Los Lobos tienen presencia delictiva, al igual que en Cotopaxi, Azuay, Tungurahua, Chimborazo, Guayas, Loja y Los Ríos, según un informe policial al que PRIMICIAS tuvo acceso. A Flourish hierarchy chart En síntesis, cualquier operativo carcelario que se realice en estas provincias y que atente contra los intereses de las organizaciones, tendrá repercusiones en las calles de las ciudades donde tienen influencia, en este caso Quito -con Colón Pico a la cabeza- y Machala. Otro ejemplo sucedió el 16 de agosto, cuando delincuentes abandonaron un vehículo cerca de una Unidad de Policía Comunitaria, en el centro de Guayaquil, con seis cilindros de gas robados horas antes en el cantón Durán. Los sujetos, miembros de la banda Chone Killers, dispararon a los cilindros con la intención de provocar una explosión, pero eso no ocurrió. El hecho se registró días después de que la Policía interviniera la Penitenciaría del Litoral, a partir del 25 de julio de 2023. Esto originó atentados terroristas en las calles de Guayaquil, Durán y Esmeraldas, también centros de operaciones de los Tiguerones. Un nuevo esquema en la Penitenciaría Las incursiones policiales en la Penitenciaría del Litoral, donde han encontrado armas, municiones, dinero, licor y drogas, provocaron un cambio drástico en los 12 pabellones de la cárcel más peligrosa del país, donde existen 5.631 privados de libertad. Por ejemplo, el pabellón uno, que era controlado por los Latin Kings, ahora lo ocupan los Tiguerones, comandados por Edwin Reyes, alias ‘Lala’ o ‘Comandante 6’. Solo en este sitio hay 913 privados de la libertad. El dos se mantiene vacío, mientras que el tres corresponde a Las Águilas, brazo armado de Los Choneros. Los Lobos se mantienen en el pabellón nueve, pero aislados de los demás, ya que el siete -un ex bastión de Tiguerones- y el ocho están vacíos, mientras que en el cuatro están los Latin Kings, al mando de Óscar Espinel, alias ‘Zapatón’, junto a 380 presos más. Una fuente policial reveló a PRIMICIAS que el motivo para aislar a Los Lobos en la Penitenciaría es la pugna que mantienen con Los Choneros, Tiguerones y Latin Kings, cuyos líderes plegaron a la tregua planteada por el líder chonero José Adolfo Macías, alias ‘Fito’. Esta reorganización ha permitido a las autoridades incomunicar a los cabecillas de las bandas con sus subordinados en las calles, ya que, por ahora, no tienen equipos de comunicación a su disposición. El origen de Los Lobos Esta banda criminal nació en 2019, en Azuay. Su líder es Wilmer Chavarría, alias ‘Pipo’, quien fingió su muerte en 2020, pero se conoce que viajó a Turquía con ayuda de Norero y con identidad falsa para escapar de la Policía. Su cercanía con José Luis Zambrano, alias ‘Rasquiña’, líder de Los Choneros, facilitó su ascenso criminal hasta convertirse en uno de los brazos armados de esa organización. Incluso, debido a esa amistad, miembros de Los Lobos -recomendados por ‘Pipo’- habrían conformado el esquema de seguridad de Zambrano, quien salió de la Cárcel de Cotopaxi por una cuestionada prelibertad en junio de 2020. Sin embargo, la repentina muerte de ‘Rasquiña’, a finales de 2020, causó un cisma en el mundo criminal. Y Los Lobos, junto a Los Tiguerones y Los Chonekillers, terminaron conformando una alianza que buscaba eliminar a Los Choneros a través de cruentas masacres carcelarias. Pero con alias ‘Fito’ al mando de Los Choneros, la alianza se reactivó tras los atentados del 25 de julio de 2023 entre todas las bandas, excepto con Los Lobos, cuyo líder, alias ‘Pipo’, ha jurado liquidar a Macías. Fotografía cedida por la Policía Nacional con los 11 detenidos de la banda Los Lobos, el 23 de mayo de 2023.  TW @CmdtPoliciaEc Y lo ha intentado varias veces. Según investigaciones policiales, alias ‘Pipo’ sería el causante del secuestro de la hija de ‘Fito’, del ataque contra su hijo en Manta, y del asesinato de varios familiares de Macías en Manabí. ‘Pipo’ intenta aprovechar el traslado de alias ‘Fito’ a la cárcel de máxima seguridad, conocida como La Roca, en Guayaquil, para tomar el control de los centros penitenciarios y de las rutas del narcotráfico que pertenecen a Los Choneros. Por el momento, Adolfo Maçías está concentrado en regresar a la cárcel Regional, en Guayaquil, y en lograr su prelibertad tras solicitar la acumulación de penas. Los dos casos están en manos del juez Diego Poma, quien ya concedió la libertad al capo albanés, Dritan Rexhepi.

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Alias ‘Gordo Lucho’, cabecilla de una banda delictiva, salió libre de la cárcel de Cotopaxi

EL COMERCIO .- El juez Byron Orejuela, de la Unidad Judicial Multicompetente del cantón Flavio Alfaro (Manabí), concedió medidas cautelares a favor de alias ‘Gordo Lucho’, cabecilla de Los Lobos y de Jairo Z. Ambos procesados por presunta delincuencia organizada ligada al narcotráfico están libres. El viernes 31 de marzo del 2023 se hicieron efectivas las boletas de excarcelación y salieron de la cárcel de Cotopaxi, donde estaban recluidos. La justificación del juez para liberarlos fue que dentro del proceso penal en contra de ambos se habrían cometido “vulneraciones al debido proceso” y por lo tanto “se vulneraron sus derechos a la libertad y a la integridad física, salud y vida”.  La postura del Gobierno  El Servicio Nacional de Atención Integral a Privados de la Libertad (SNAI) rechazó esta decisión judicial. Dijo que el juez otorgó la libertad “pese a que la normativa y jurisprudencia de la Corte Constitucional establece de forma clara que las garantías jurisdicciones no pueden ser utilizadas para generar intromisiones en la justicia ordinaria”. La entidad añadió que “una vez más se está utilizando la justicia constitucional de manera indebida”, pues el juez Orejuela “desnaturaliza las medidas cautelares constitucionales y contraviene normativa expresa”.   El SNAI reconoció que tuvo que liberar alias ‘Gordo Lucho’ y Jairo Z. para acatar la orden de autoridad judicial. Sin embargo, apelará esa decisión.   “Se está presentando la correspondiente revocatoria de la medida cautelar concedida y una denuncia en contra del referido juzgador por considerar que sus actuaciones incurren en dolo, manifiesta negligencia y error inexcusable”, agregó el SNAI.   La reincidencia en delitos  No es la primera vez que alias ‘Gordo Lucho’ sale en libertad. El 14 de diciembre de 2022 fue recapturado con droga y armas en Los Ríos. Su captura se dio pocos días después de que un juez otorgó medidas sustitutivas a la prisión.   Este cabecilla tiene procesos judiciales por tráfico de armas, de drogas, tenencia de armas, delincuencia organizada, asociación ilícita y homicidio.   Es señalado como el presunto responsable del asesinato de Santiago Loza, exdirector de la Cárcel de El Inca, en Quito.   La Policía capturó al Gordo Lucho el 4 de febrero de 2022, en una vivienda de Samborondón, con más de 50 kilos de droga. Pero en abril de ese año lo liberaron en una audiencia de revisión de medidas.   Meses después, las autoridades lo recapturaron por su relación con el crimen de Loza, pero le dictaron medidas alternativas a la prisión.   El 14 de diciembre de 2022 lo arrestaron en un operativo antidrogas, en Quevedo. Estuvo preso hasta el 31 de marzo de 2023, cuando el juez Orejuela lo liberó nuevamente.   Jairo Z., en cambio, tiene procesos penales por tráfico de drogas, robo, delincuencia organizada y homicidio.   Reacciones de otras instituciones del Estado  “El 14 de diciembre de 2022, alias ‘Gordo Lucho’, líder de la banda delictiva Los Lobos, fue capturado por la Policía Nacional. ¡Ayer, un juez ordenó su liberación!  Rechazamos y condenamos el accionar de ciertos jueces, que atenta contra la seguridad de todos los ecuatorianos”, indicó el Ministerio del Interior.   Tras conocer la decisión del juez Ojeda, este sábado 1 de abril del 2023, la Fiscalía dijo que “durante los últimos meses, la sociedad ha sido testigo de la forma en que ciertos jueces de garantías constitucionales han dejado en libertad a sentenciados por delitos que por su naturaleza son considerados graves”. Por lo tanto, la fiscal general, Diana Salazar “hace un llamado a la Corte Constitucional para que establezca o delimite parámetros para que los juzgadores cuenten con un sistema de control eficaz frente a decisiones claramente contrarias a la ley”.   La Fiscalía también señaló que “estos jueces cuentan con un cobijo a sus decisiones debido a que el 18 de abril del 2018, el Pleno de la Corte Constitucional emitió la sentencia que instauró la impunidad de los juzgadores frente al delito de prevaricato al tratarse de decisiones relacionadas con garantías jurisdiccionales”.   Esa entidad “insiste en que el sistema de justicia debe trabajar como un engranaje, en el que cada parte debe cumplir con sus competencias y asumir sus responsabilidades”.

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Siete directores han pasado por la cárcel de Latacunga en 18 meses

Quienes habitan o visitan la cárcel de Cotopaxi saben que el control es mínimo. Las bandas se han apoderado de espacios como el centro de visitas, trámites penitenciarios, enfermería e incluso controlan la entrega de comida y suministros. En ese centro los presos tienen celulares, acceso a Internet y computadoras. Las bandas poseen las llaves de los candados de las celdas y de los pabellones. Las autoridades del sistema carcelario (SNAI) y del Ministerio del Interior son las únicas que han negado esta realidad. Los guías penitenciarios, que laboran en ese penal, afirman no tener el control de las celdas. Lo mismo dicen los funcionarios que trabajan en la parte administrativa. Los abogados de los detenidos también conocen todo lo que ocurre adentro de la cárcel. Según relatos de estas personas, en el interior los presos se dividen en tres: los cabecillas, sus aliados y las ‘chachas’. Así son conocidos los reos que no tienen dinero y que se convierten en sirvientes de los líderes. En este grupo también están expolicías y exmilitares, que cumplen penas por varios delitos. EL COMERCIO habló con un exuniformado que estuvo preso en la cárcel de Cotopaxi hace unos meses. Él relató que adentro las ‘chachas’ se encargan de lavar la ropa de los jefes de las bandas, hacerles mandados, limpiarles los pisos, los baños, entre otras cosas. “Nosotros somos prácticamente esclavos de los jefes”, dice. El exdetenido cuenta que las mafias intensificaron su poder en el último año y medio.  De hecho, las cifras oficiales de los centros de detención del Ecuador señalan que durante la presente gestión se incrementaron los crímenes en las cárceles. El SNAI ha sumado ya 410 muertes en los centros carcelarios de todo el país. En la prisión de Cotopaxi se han registrado 44 muertes violentas. Una de las últimas ocurrió hace una semana. Un hombre apareció sin signos vitales en uno de los pabellones de máxima seguridad. Hasta ahora el SNAI no ha esclarecido los hechos de cómo ocurrió esa muerte en ese centro. Lo mismo sucede con el resto de fallecimientos en otros presidios. Uno de ellos ocurrió en la cárcel de El Rodeo, donde un detenido apareció muerto el 21 de octubre. Los crímenes están en la impunidad, pues las autoridades no han judicializado a nadie. Hay procesos abiertos por los amotinamientos, pero no hay responsables de esos hechos. ¿Por qué las mafias tienen tanto poder en la cárcel? Existen muchos factores que el SNAI ha analizado. Sin embargo, hay una razón de la que poco se habla: la inestabilidad de las autoridades, especialmente en el cargo de Director. En un año y medio, la cárcel de Cotopaxi ha tenido siete directores. Eso significa que, en promedio, cada autoridad ha estado un poco más de dos meses. En la lista de directores fugaces están Marco Limaico, Valeria Balseca, Bolívar Garzón, Víctor Andrade, Luis Paredes, José Arévalo y Washington Escobar. Este último inició sus funciones este mes. Según los documentos oficiales de transparencia, la mayoría tuvo un sueldo de USD 2 418. Pero su breve paso en la Dirección de la cárcel ha hecho que los trabajos y proyectos de rehabilitación no se desarrollen de forma adecuada. De hecho, esta cárcel aún no cuenta con un sistema de vigilancia total. Tampoco hay inhibidores de señal y los escáneres en los accesos están obsoletos. Existen zonas comunes donde no hay seguridades o que resultaron destruidas en los distintos amotinamientos registrados. Así lo revelaron los miembros de la Comisión de Pacificación de las prisiones. En su informe detallaron que esa cárcel aún tiene un elevado hacinamiento. Informes de derechos humanos también indican que existen daños en el sistema de alcantarillado, agua potable y sanidad. Recursos pendientes Todas estas fallas estructurales han sido observadas por el SNAI. Sin embargo, el presupuesto no ha sido asignado porque este órgano de control del sistema carcelario también ha tenido inestabilidad en sus directores. La entidad acaba de nombrar a su sexto Director Nacional. Marco Jurado, presidente de la Fundación Inccadi de derechos humanos, señala que la falta de políticas públicas del Gobierno en materia penitenciaria ha hecho que no existan profesionales de carrera al frente de las cárceles. “El Gobierno no tiene un plan establecido para mejorar la rehabilitación. Todo se basa en operativos aislados. Por eso seguimos viendo matanzas”.   Fuente: El Comercio

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